6 Recetas con puerros originales y saludables que los niños comen sin rechistar
Más allá de la sopa de patatas y puerros, los puerros son un excelente producto para darle sabor a tus comidas, pero es normal que a los peques les cueste comerlo.

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Si te gusta la sopa de puerros y patatas, te van a encantar estas recetas. Además de la clásica Vichyssoise, los largos puerros, verdes y blancos, pueden ser una verdura misteriosa. Pero, ¿qué pasaría si te dijéramos que los puerros pueden ser un sustituto ligeramente dulce a la cebolla? Y es precisamente por ese sabor tan característico que a menudo a los niños (y a muchos adultos) no les gusta el puerro.
Los puerros están compuestos por muchas capas apretadas y es habitual que acumulen tierra entre las capas. Este es el mejor método para limpiarlos: coloca los puerros en rodajas en un recipiente grande con agua y agítalos para separar las capas. Déjalos reposar de 5 a 10 minutos y luego sácalos con una espumadera o un colador, teniendo cuidado de no arrastrar con ellos la tierra que se a hundido hasta el fondo.
Para empezar, debes saber que puedes usar puerros en cualquier receta que lleve cebollas o chalotas. Añaden un delicioso sabor a una amplia variedad de sopas, pero también son una buena adición a platos de pasta e incluso en ensaladas. Pruébalos asados en ensalada o con macarrones de queso, pollo y brócoli. ¡Incluso son excelentes en una pizza!


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