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La temporada del ruibarbo es corta pero dulce, así que conviene aprender a congelar esta maravilloso vegetal para poder disfrutar de su sabor ácido y bondades durante todo el año, ya que, en España, el ruibarbo se recoge entre mayo o junio. Toma nota, porque lo vas a utilizar mucho para cocinar tus mejores recetas de crumbles y las de tartas de otoño.
Qué parte del ruibarbo se come
El aspecto de esta verdura es similar al apio, de hecho pertenece a la misma familia, aunque sus tallos son dulces, mientras que las hojas son amargas y tendrás que tirarlas.
¿Por qué congelar ruibarbo? Si tienes un exceso de ruibarbo de temporada (o de ruibarbo forzado), tiene sentido congelar un montón para utilizarlo en sabrosas recetas de postres. Por suerte, los tallos rosas del ruibarbo se congelan muy bien con un esfuerzo mínimo, así que lo tendrás a mano para preparar, por ejemplo, esta receta fácil y original de tarta de ruibarbo con pistachos.
Cómo preparar el ruibarbo para congelarlo
Asegúrate de que el ruibarbo esté fresco, crujiente y sin manchas. Si los tallos son fibrosos, pela las fibras exteriores duras y retira las hojas, ya que son venenosas. No olvides limpiar los tallos bajo un chorro de agua fría para eliminar la suciedad.
¿Se puede congelar el ruibarbo sin escaldarlo? Por supuesto que sí. Una vez lavado, córtalo en trozos grandes de 2,5 cm. Coloca en una bandeja forrada con papel de horno y congela durante dos horas; a continuación, introduce las porciones en una bolsa o recipiente apto para el congelador. Puedes consumirlos durante 3 meses.
Si prefieres escaldar el ruibarbo antes de congelarlo, verás que se conserva mejor el color y el sabor. De hecho, es recomendable si piensas conservarlo congelado más de tres meses. La mejor forma de cocerlo es introducir los tallos de ruibarbo en agua hirviendo, durante un minuto, para luego escurrir y sumergir de inmediato en agua helada.
Congeladores de cocina
Beneficios del ruibarbo para la salud
Con este proceso vas a conseguir detener la cocción y fijar el color del vegetal, además de retener un pigmento denominado antocianina, que tiene propiedades antiinflamatorias, anticancerígenas y antioxidantes. Para terminar, vuelve a escurrirlo y extiéndelo sobre papel de cocina hasta que se seque completamente.
Cómo utilizar el ruibarbo congelado
A continuación hay que tomar otra decisión: ¿quieres utilizar porciones más pequeñas de ruibarbo congelado varias veces o reservarlo para un solo uso? Si lo has metido en una bolsa de congelado o en un recipiente, así que necesitas descongelar los tallos de ruibarbo a temperatura ambiente o en el frigorífico para utilizarlo como más te apetezca, incluso puedes añadir ruibarbo congelado directamente a los batidos para desayunar ya que mejoran tu función cerebral, según los doctores. Incluir el ruibarbo en smothies es una excelente opción, aunque es mejor combinarlo con frutas más dulces, ya que es puede resultar muy ácido por sí solo.
Es posible que te decidas a hacer un buen crumble de ruibarbo, pero ¿se puede congelar esta receta? Por supuesto que sí, tanto si lo has horneado o sin hornear. Nuestra única sugerencia sería cocer primero la capa de ruibarbo para asegurarnos de que esté bien cocido al descongelarlo. El crumble puede quedar un poco más líquido de lo normal, pero seguirá estando delicioso.
Recipientes y accesorios para congelar
