- Celosías, vallas y paneles de mimbre o bambú para el jardín o la terraza.
- Un impresionante jardín de diseño moderno y ecléctico.
- Terrazas y patios, pequeños y grandes, para disfrutar.
- Una piscina infinita multicolor es una obra de arte.
El verano está a punto de comenzar. El buen tiempo se hace notar y solemos aprovechar más los exteriores del hogar. Generalmente, la piscina es el centro de encuentro para toda la familia durante la época estival; por eso, es imprescindible que esté siempre en óptimas condiciones como para disfrutar de refrescantes baños y momentos únicos en compañía de los tuyos.
En el jardín tenemos la oportunidad de instalar una piscina desmontable o hacer una piscina de obra. En cualquiera de los casos, debemos poner a punto la piscina para el verano y preparar el agua para que esté en perfecto estado. Si quieres saber cómo tener una piscina en buen estado justo para el comienzo del verano, te damos algunos buenos consejos que son útiles, prácticos y funcionales.
Cuidados de la piscina durante el invierno
Lo primero que has de saber es que la preparación varía en función de si has llevado a cabo el invernaje de la piscina; es decir, si durante la época de otoño e invierno has aplicado algún tratamiento para mantenerla en las mejores condiciones. Si lo has hecho, la puesta en marcha en verano te resultará más sencilla, menos laboriosa y mucho más económica.
El tratamiento incluye la aplicación de un producto para que el agua no se ensucie, la activación del filtro regularmente y la protección de la superficie con una cubierta. De esta forma, no necesitarás hacer un cambio de agua y no habrán caído residuos que puedan contaminarla. En realidad, no se aconseja el cambio del agua, a no ser que esta se encuentre completamente contaminada. Si has cumplido esta premisa, la puesta a punto de tu piscina te será muy fácil.
Preparación de la piscina para el verano: primeros pasos
En primer lugar, debes retirar la cubierta de plástico que la ha protegido durante el invierno y limpiarla. Conviene quitar todos los residuos y suciedad de la superficie y dejarla secar antes de guardarla. Este paso es importante para mantener limpia la piscina desmontable o la piscina de obra.
El siguiente paso es echar un vistazo al agua. Si el nivel de la piscina ha descendido, tendrás que volver a echar agua hasta el nivel apropiado. En cambio, si es excesivo, no hay problema, puesto que nos será útil para las tareas de limpieza y puesta a punto de la piscina.
En el caso de que esté limpia, bastará con que elimines las impurezas del fondo, de las paredes y de la superficie con barredores manuales, limpiafondos de piscina semiautomáticos o aspiradoras automáticas. Después, es preciso ajustar el pH (entre 7,2 y 7,6) y realiza la cloración del agua para que sea más fuerte del habitual. Este es el medio más eficaz para desinfectar el agua de la piscina.
Limpiar la piscina y eliminar los residuos
Existe la posibilidad de que el agua esté sucia a pesar de haber aplicado a tu piscina un tratamiento durante el invierno. En ese caso, debes limpiarla antes de ajustar el pH y efectuar la cloración rápida o de choque. Esta es la mejor manera de cuidar las piscinas bonitas y funcionales para jardines de casas.
La recuperación del agua implica la revisión del sistema de filtración y el uso de floculante, sustancia química que ayuda a aglutinar las partículas sucias en el fondo del vaso o en el filtro para que, posteriormente, puedan ser retiradas mediante el limpiafondos o por aspiración. En caso de encontrarnos ramas, hojas u otros residuos de gran tamaño, los debemos apartar primero para evitar un atasco en las tuberías.
Completar la puesta a punto de la piscina
En la preparación de la piscina para el verano, es conveniente completar el proceso comprobando el óptimo funcionamiento de los sumideros, los filtros, la bomba, las escalerillas, las duchas de exterior, etc. Por otro lado, conviene limpiar a conciencia todas las áreas adyacentes del vaso: la línea de borde de flotación, las paredes y los skimmers.
En el caso de que no hayas protegido la superficie con una cubierta de plástico durante el invierno, es posible que el agua esté muy sucia. Dependiendo del nivel de suciedad o contaminación de la misma, consulta a un experto que sea capaz de devolver las condiciones de higiene y salubridad a tu piscina sin necesidad de cambiar el agua.
¿La piscina no ha tenido invernaje? Más consejos
Si tienes un jardín o patio con piscina y no se ha realizado el invernaje, es recomendable limpiar la piscina desmontable o de obra atendiendo a los siguientes consejos:
- Vacía la piscina y limpia las paredes y el fondo con un producto desincrustante; pasa el cepillo por todas las paredes y áreas deteniéndote en las esquinas, escaleras y otros rincones difíciles de alcanzar. Si la piscina es de gresite, evita los limpiadores a presión porque podrían dañarlo; en caso contrario, puedes aumentar la presión del agua para desincrustar marcas de suciedad. Si durante la limpieza observas rotos o fisuras en el material del vaso, no lo dejes pasar y aprovecha para hacer las pertinentes reparaciones.
- Limpia en profundidad cada uno de los elementos de la depuradora: los filtros, las boquillas impulsoras y los skimmers que recogen el agua para su filtrado.
- Antes de llenar tu piscina, asegúrate de verificar que tanto los sistemas de mantenimiento como el sistema de filtración de agua y de circulación. Se debe comprobar que el aporte de la misma esté funcionando en correctas condiciones.
- Comienza luego el proceso de llenado y ve controlando muy de cerca los niveles apropiados de pH. Estos se debe hacer en las piscinas desmontables como en las de obra.
- Después de llenarla, es momento de aplicar el desinfectante para combatir las bacterias. También es necesario utilizar un producto algicida y otro floculante, tanto si son piscinas hinchables pequeñas como las grandes de obra.
Una vez completada la puesta a punto de la piscina, es importante que continúes con el control y análisis de todos los aspectos que contribuyen a mantenerla limpia y cristalina. El mejor momento del día para llevar a cabo los tratamientos químicos es al caer la tarde o durante la noche, siempre siguiendo las instrucciones de dosificación, forma de aplicación y recomendaciones de protección de cada producto.