15 alimentos que debes comer cuanto tienes molestias de estómago (y cuáles evitar)

"El kéfir es una bebida láctea fermentada rica en probióticos que tiene un sabor ácido y picante y una consistencia fina", dice Stefani Sassos, dietista. "Proporciona una dosis saludable de probióticos diversos, que pueden ayudar a equilibrar el microbioma intestinal. También se ha demostrado que apoya un sistema inmunológico saludable y suprime las infecciones virales". Esto puede aliviar algunas molestias y ayudarte a sentirte mejor. Busca variedades bajas en azúcar, ya que las opciones con más azúcar pueden exacerbar los síntomas. Por cierto, tenemos la mejor receta de Kéfir, huevo y patata.

Las verduras crudas pueden ser difíciles de digerir, pero las hervidas o al vapor, como las judías verdes, pueden ser más fáciles de procesar para tu sistema, y aportarán una dosis de nutrientes que tu cuerpo necesita para funcionar bien y combatir lo que te aqueja, dice Sassos. Apuesta por las recetas con judías verdes, porque son muy saludables..

"La compota de manzana es una ayuda increíble para que tu estómago vuelva a funcionar", dice Jessica Stamm, nutricionista dietista. "Es fácil de digerir pero aporta nutrientes importantes como la pectina (un tipo de fibra) y el potasio, un mineral que funciona como electrolito para ayudar a mantener equilibrados los niveles de líquidos". También puedes probar a hacer otras recetas con manzanas.

Las zanahorias cocidas son una forma estupenda de potenciar la nutrición y el sabor cuando tu menú es limitado. "Cocinar verduras como las zanahorias o las espinacas hace que sean más fáciles de digerir, y son perfectas en revueltos de huevo o sopas a base de caldo", dice Stamm.

"Puedes tener la tentación de optar por opciones integrales y ricas en fibra cuando se trata de carbohidratos, pero lo suave es lo mejor cuando tu barriga está mal", dice Stamm. Como el arroz blanco es bajo en fibra, es más fácil de digerir y lo bastante suave como para calmar un malestar estomacal. Por cierto, hacer arroz blanco es fácil y lo puedes hacer en solo tres pasos.

Tomar un poco de proteína es importante, incluso cuando te sientes mal, pero opta por cosas como el pollo o el pescado, que son más fáciles de digerir y se preparan de forma sencilla en comparación con la carne roja más grasa. Las recetas de pollo son infinitas y "las proteínas no condimentadas pueden ser un buen complemento para el arroz blanco o el boniato al horno", dice Stamm.

"Los plátanos son excelentes porque son fáciles de digerir y se considera que no irritan el estómago y el tracto gastrointestinal superior", dice Julie Upton, cofundadora de Appetite for Health. Esta fruta rica en fibra no sólo mantiene el sistema regular y ayuda a recuperarse de la diarrea, sino que la vitamina B6 también reduce la hinchazón causada por la retención de líquidos y el magnesio ayuda a relajar los músculos.

Aunque pueda parecer contrario a la intuición, mantener la barriga vacía cuando te sientes mareado puede crear más náuseas porque no hay nada en el sistema que absorba el ácido estomacal. Upton sugiere picar tostadas blancas cada pocas horas ya que los almidones de estos carbohidratos simples "carecen de fibra, proteína y grasa - todos los cuales ralentizan la digestión y permanecen más tiempo en el estómago".

"Las fuentes de proteínas ricas en grasas, como las carnes rojas o procesadas y los alimentos fritos, pueden provocar reflujo, sobre todo si se consumen en grandes cantidades a altas horas de la noche", afirma Jaclyn London, dietista titulada. "Los huevos son una alternativa más fácil de digerir y una forma sencilla de satisfacer tus necesidades proteicas sin llenarte demasiado, demasiado rápido". Además, los huevos son una estrella de la gastronomía y los puedes hacer de mil formas.

Los alimentos prebióticos, como los productos agrícolas, los cereales integrales, las legumbres, los frutos secos y las semillas, pueden ayudar a «alimentar» las bacterias intestinales beneficiosas del tracto gastrointestinal, explica London. Al estimular el microbioma, los prebióticos refuerzan la inmunidad intestinal y previenen la inflamación, la diarrea y otros problemas gastrointestinales, según una investigación de 2013 del Instituto de Tecnólogos de los Alimentos. Abastécete de tomates, achicoria, cebollas, espárragos y trigo para obtener beneficios. Entre ellos está el tomate, que vale desde el desayuno hasta el postre.

Los alimentos ricos en calcio, magnesio y potasio también reducen la hinchazón abdominal al equilibrar el sodio. Además, estos minerales no sólo sirven para eso: El calcio es esencial para la contracción del músculo liso que mueve los alimentos por el tubo digestivo, el potasio regula el equilibrio de líquidos y el magnesio activa las enzimas necesarias para descomponer los alimentos.

Añadir cereales integrales puede aliviar las molestias estomacales y prevenir futuros problemas intestinales. "La fibra soluble de la avena atrae el agua hacia el tracto digestivo y mueve los alimentos a través del cuerpo", dice London. Intenta ingerir al menos entre 25 y 35 gramos de fibra total al día, pero no te excedas. "Tanto el hambre como comer en exceso pueden empeorar las náuseas, la hinchazón, el dolor abdominal y los gases"», añade.

"Té de jengibre, suplementos de jengibre, pastillas de jengibre - el jengibre se ha demostrado en algunos estudios para ayudar a aliviar las náuseas y los vómitos", dice Upton. "De hecho, a menudo se recomienda para las náuseas matutinas y para las náuseas inducidas por la quimioterapia". En el caso de las molestias estomacales de los niños, conviene consultar primero con el pediatra antes de introducirlo. Por cierto, el jengibre lo puedes cultivar en casa.

La deshidratación suele provocar estreñimiento, por lo que tomar bebidas sin azúcar, como el té, así como agua sin gas o con gas, puede mantener todo en movimiento. La mayoría de la gente necesita un mínimo de ocho tazas al día. "Mantenerse hidratado facilita la digestión y ayuda con los gases y el estreñimiento", dice Bauer.

Si sabes que tus problemas de estómago se deben al estreñimiento, London también recomienda tomar una taza de café a primera hora de la mañana. Las investigaciones han demostrado que la cafeína y los antioxidantes vegetales del café pueden ayudar a mantener la regularidad. Evita las bebidas con cafeína si eres sensible, sientes náuseas o tienes reflujo no relacionado con el estreñimiento. El café, sin embargo, no es una buena idea para las personas a las que el ácido les molesta en el estómago, dice Freuman.

Tan importante como aliviar un problema estomacal es prevenirlo sabiendo lo que no se debe comer. Es aconsejable mantenerse alejado de estos desencadenantes:

Alimentos fritos y grasos: "Los alimentos grasos pueden ser difíciles de digerir, y comer demasiado puede provocar diarrea e hinchazón", dice Bauer.

Alimentos picantes: La comida picante puede desencadenar molestias gastrointestinales como reflujo, indigestión y diarrea en muchas personas, dice Bauer.

Verduras ricas en fibra: "Las verduras ricas en fibra como el brócoli, la coliflor, las coles de Bruselas y la col son realmente buenas para ti, pero pueden provocar gases, hinchazón, calambres, estreñimiento o diarrea si añades demasiada cantidad a tu dieta demasiado rápido", dice Bauer.

Alimentos ricos en fibra: "Cosas como la col rizada, las judías, las lentejas, los cereales integrales e incluso las palomitas de maíz son alimentos voluminosos y fibrosos que ocupan mucho espacio y, en general, son los más propensos a provocar el sistema gastrointestinal", dice Freuman.

Azúcar y edulcorantes: Los edulcorantes, incluidos los azúcares naturales, pueden ser molestos para algunas personas. "El sorbitol y el xilitol, por ejemplo, pueden provocar hinchazón, gases o diarrea", dice Bauer.

Bebidas alcohólicas: El alcohol puede interferir en la secreción de ácido gástrico y relaja el esfínter esofágico, permitiendo que el ácido estomacal suba por el esófago y provoque indigestión. "También puede provocar diarrea en algunas personas", dice Bauer.