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A menudo considerada como una alternativa más saludable a los refrescos, el agua con gas ha crecido mucho en popularidad en los últimos años, y se espera que esa tendencia siga creciendo. Esta bebida burbujeante ahora está disponible en todos los sabores imaginables, e incluso puedes prepararla en casa. Y lo bueno es que el agua con gas es una excelente manera para mantenerte hidratada/o, especialmente si estás aburrida/o de beber agua del grifo.
"Pero hablamos del agua con gas en su forma más sencilla, sin azúcar añadido ni edulcorantes artificiales, que se hacen pasar por 'refrescos saludables'", dice Jaclyn London, consultora de nutrición, presentadora de podcast y autora de Dressing on the Side (and Other Diet Myths Debunked). "Creo que es genial que ahora hayamos incorporado esta categoría de bebidas."
Pero a medida que cada vez más marcas de agua con gas llenan los pasillos del supermercado, es posible que te preguntes si realmente puedes reemplazar el agua sin gas y si es malo de alguna forma. Acudimos directamente a los expertos para responder a todas estas preguntas sobre el agua con gas.
¿Qué es el agua con gas?
Según Yezaz Ghouri, gastroenterólogo del sistema de atención médica de la Universidad de Missouri, el agua carbonatada es simplemente agua (H2O) que ha sido infundida con gas de dióxido de carbono (CO2) a alta presión. Este proceso crea una bebida "gaseosa" que podemos ver en varias formas diferentes, que incluyen agua mineral, gaseosa, agua mineral con gas y agua tónica.
Lo que diferencia a este tipo de bebidas depende de varios factores, como sus métodos de carbonatación, las fuentes de agua y, lo que es más importante, los ingredientes añadidos.
Los diferentes tipos de agua gas son:
Algunas marcas de agua con gas o carbonatadas, pueden contener aditivos adicionales para mejorar su sabor, como sal, edulcorantes artificiales y agentes saborizantes, por lo que es importante revisar la etiqueta antes de comprar.
Beneficios para la salud del agua con gas
Hay muchas razones para disfrutar de esta bebida gaseosa.
Al elegir un agua con gas, asegúrate de buscar las que sean bajas en calorías y azúcares. Evita las opciones con sirope de maíz, fructosa, sal o saborizantes y edulcorantes artificiales como el aspartamo y la sucralosa. Siempre es más inteligente optar por agua carbonatada, soda o agua mineral con gas en vez de agua tónica.
Efectos secundarios del agua con gas
"En mi opinión, hay muy pocas razones para preocuparse por beber 'demasiada' agua con gas. Personalmente me rehidrato con agua con gas después del ejercicio, ¡así de fan incondicional soy!" dice Jaclyn London. "Pero en realidad se trata de opción personal, y siempre es una buena idea mezclarlo con agua sin gas".
Dado que el agua con gas contiene CO2, las burbujas en esta bebida gaseosa pueden causar gases e hinchazón, y el Dr. Ghouri también señala que las marcas que contienen edulcorantes artificiales pueden causar diarrea e incluso alterar el microbioma intestinal. Evita el agua carbonatada si padeces problemas gastrointestinales como el síndrome del intestino irritable, y sobre todo si padeces diarreas recurrentes, ya que esto es deshidratante y anulará todo su esfuerzo de hidratación burbujeante.
¿Te preocupa que el agua con gas sea dañina para los dientes?
Puede que te preguntes sobre las afirmaciones de que la carbonatación erosiona el esmalte dental. Es cierto que el agua carbonatada es un poco más ácida que el agua normal, pero el riesgo de estropear tus dientes blancos sigue siendo bastante bajo. "¿Es un poco más dañino que el agua normal? Probablemente... porque estás exponiendo tus dientes a una solución ácida. Pero el riesgo es realmente mínimo", dice el Dr. Ghouri, así que no dejes que este temor exagerado te detenga de beber agua con gas y disfrutar de los beneficios del agua mineral. Si necesitas un poco más de seguridad, la Asociación Dental Estadounidense incluso dice que el agua con gas es "generalmente buena" para los dientes, siempre que no contenga azúcares añadidos.
Agua con gas "sin azúcar"
Y finalmente, ¿qué pasa con todas esas aguas con gas comercializadas como alternativas "sin azúcar" o "bajas en azúcar" a los refrescos? Si en general te hidratas correctamente y quieres disfrutar de uno de vez en cuando, no pasa nada, pero no te acostumbres a confiar en esos productos como fuente principal de hidratación, dice London. "Estamos empezando a ver que se añaden alcoholes de azúcar o almidones resistentes a algunas aguas con burbujas, especialmente las que se venden como 'refrescos prebióticos'. Estos son compuestos derivados de alimentos que ocurren naturalmente (encontramos ambos en frutas y verduras de forma ubicua en la naturaleza), pero cuando se elaboran con el propósito de agregar fibra o dulzura a las bebidas, pueden ser contraproducentes", explica London.
¿El agua con gas es mejor que el agua normal?
Un vaso de agua carbonatada natural es tan hidratante como el agua normal y puede ser una fantástica alternativa a los refrescos azucarados. "No hay pruebas importantes de que el agua con gas natural tenga efectos nocivos para la salud. Sin embargo, si alguna vez tienes dudas, nunca puedes equivocarse al optar por la opción más segura y saludable: el agua corriente sin gas". "El agua corriente es la mejor forma de hidratación", dice el Dr. Ghouri.
El resultado final: siempre debes tener en cuenta los ingredientes añadidos en las aguas con gas, especialmente el azúcar, los edulcorantes artificiales y la sal, todos los cuales pueden tener efectos potencialmente dañinos. "Al elegir un agua con gas, revisa en la etiqueta que tienga cero gramos de azúcar para asegurarte de que estás eligiendo el mejor agua para hidratarte", recomienda London.

Alyssa is a senior editor for the Hearst Health Newsroom, where she has written research-backed health content for Prevention, Good Housekeeping and Woman's Day since 2017. She has more than 13 years of reporting and editing experience and previously worked as research chief at Reader’s Digest, where she was responsible for the website's health vertical as well as editing health content for the print magazine. She has also written for Chowhound, HealthiNation.com, Huffington Post and more.