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La Maranta o Planta de la Oración es una de las plantas de interior más decorativas. Los distintos tonos de sus hojas crean efectos preciosos. La Maranta o Planta de la Oración, emparentada con la Calathea (ambas de la familia de las Marantáceas), es originaria de América, específicamente de los bosques húmedos de Brasil.
Sus hojas tienen una preciosa mezcla de colores que van desde el verde oscuro, amarillos y rosas. El envés de las hojas tienen un llamativo color púrpura.
Es una de las plantas de interior más fáciles de cuidar. Requiere pocas atenciones y ella misma con el color de las hojas te va a decir si le falta algo de luz o le sobra. La característica más peculiar de la Maranta es que por la noche pliega las hojas y al amanecer vuelve a abrirlas, este fenómeno se llama tropismo.
Cuidados de la Maranta o Planta de la Oración
- LUZ. No necesita luz directa, aunque sí estará genial en un rincón luminoso. Si las hojas blanquean es que está recibiendo mucha luz directa.
- TEMPERATURAS. Aunque es una planta bastante resistente no lleva muy bien los extremos. Su temperatura ideal gira en tornos a los 18-20º C. Protégela de las heladas y temperaturas por debajo de 3ºC.
- RIEGO. La tierra debe estar húmeda pero ten cuidado de evitar encharcamientos. En los meses más fríos deja que se seque la capa superficial de la tierra antes de regar otra vez. Las hojas se deben rociar con agua para emular el ambiente húmedo de los bosques americanos.
Conviene cambiarle a una maceta ligeramente mayor cada año para que las raíces vayan teniendo un poco más espacio y se fortalezcan. Debes saber que la maranta es una planta cubresuelos de los bosques húmedos de Brasil, así que no tiene tallos muy fuertes. Las raíces son su sostén. Puede que tu planta necesite una guía para que se mantenga erguida. Y por supuesto evita las corrientes de aire.
La maranta es perfecta para casas con animales y niños ya que no es una planta tóxica.
