3 ideas prácticas para guardar la ropa de invierno en una casa pequeña sin que apenas ocupe espacio
Empieza a hacer hueco en tu armario para la ropa de entretiempo y por qué no, para la ropa de verano. Guarda la ropa de invierno con estas ingeniosas ideas para casas pequeñas.

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Después las últimas lluvias y borrascas, parece que finalmente los días están cambiando y, por fin, vamos a tener una primavera más cálida. Así que, toquemos madera, eso significa que podremos empezar a sacar nuestras falditas y blusas ligeras del fondo del armario y guardar la ropa de invierno como los abrigos, jerséis de lana y pijamas invernales, durante algunos meses. Desde luego, no tiene ningún sentido perder un valioso espacio en tu armario con ropa que sabes que no vas a usar durante bastante tiempo. Y si vives en una casa o piso pequeño, el tema de optimizar el espacio es crucial.
Cómo cuidar la ropa de invierno que vas a guardar
Si te preocupa mantener tu querido suéter de cachemira libre de polvo (y de polillas) hasta la próxima temporada, no te preocupes: hay formas de guardar tu ropa de invierno para que esté como nueva cuando llegue el momento de abrigarte otra vez. Fundamental: guardarlos recién lavados y planchados para mantenerlos en óptimas condiciones.
Aquí tienes algunas ideas para guardar la ropa de invierno en casas pequeñas y tener espacio en tu armario para tu nueva colección de vestidos de verano.
Ahorradores de espacio. La ropa de invierno, como los jerseys gruesos, pueden ocupar mucho espacio. Las bolsas de vacío son la mejor opción para que la ropa ocupe la mitad del espacio y además te van a servir también para tu hacer la maleta cuando vayas de viaje. Guarda las bolsas de ropa cuidadosamente en una caja y colócala debajo de tu cama o en el altillo de tu armario. Las bolsas para guardar ropa mantendrán todo limpio ya que protegen la ropa del polvo y de las temidas polillas.
Almacena bajo tu cama. El espacio debajo de la cama es el lugar perfecto para guardar el edredón y la ropa más voluminosa mientras no los necesitas. Algunas cajas debajo de la cama tienen compartimentos, muy útil si tienes que sacar algo sin arrugar el resto de la ropa. Y muchas tienen paneles transparentes, para que puedas comprobar lo que hay de un vistazo.
Almacenaje decorativo. Las casas pequeñas suelen carecer de espacio de almacenaje. Una buena idea es colocar una caja bonita con las mantas o un baúl a los pies de tu cama y usarlo para guardar artículos que no necesitas tener a mano. Los baúles o cajas más pequeños también pueden funcionar como mesitas auxiliares.
Mantenlos frescos. Si guardas abrigos de invierno en un armario o en un burro para ropa, asegúrate de que se mantengan frescos para el próximo invierno manteniéndolos con una funda. Nuevamente, un spray anti polillas o algunos anillos de cedro ayudarán a mantener tus prendas a salvo.
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