Cómo limpiar tu casa con vinagre de limpieza: 14 trucos muy efectivos
Desde las ventanas hasta el lavavajillas: el vinagre de limpieza es uno de los limpiadores caseros más efectivos y más baratos que existen.
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Si hay una solución casera que ha ido adquiriendo importancia con el tiempo en lo que a tareas de limpieza se refiere, ese es el vinagre de limpieza. Un vinagre, por supuesto, diferente al vinagre que utilizamos para aliñar la comida y que se ha posicionado como uno de los mejores desinfectantes caseros. Tanto es así, que son muchos los expertos que elogian los beneficios de usar el vinagre blanco destilado (su nombre original) como potente limpiador para (casi) infinitos usos.
Y es que, el vinagre no solo es eficaz para limpiarlo prácticamente todo, sino que es un producto bastante barato, que está disponible en la mayoría de supermercados y que, además, no es tóxico por lo que es bastante más seguro que la lejía o que el amoniaco.
Te explicamos cuáles son las diferentes de este vinagre con el vinagre de aliñar las comidas, cuáles son las características que consiguen que sea un limpiador potente y algunos trucos sencillos y efectivos para usarlo en la limpieza del hogar. Además, aquí tienes también otros trucos para limpiar con bicarbonato, el otro limpiador potente que todo el mundo tiene en su casa.
Diferencias entre el vinagre de limpieza y el vinagre normal
Se utiliza más el vinagre blanco para limpiar porque tiende a ser el más ácido, con un 4% y un 7 % de ácido acético, mientras que los vinagres de sidra y de vino suelen tener entre un 5% y un 6% de esta formulación. Pero eso no hace que otros vinagres sean totalmente inútiles.
Si quieres preparar tu propia solución desinfectante en casa, combina vinagre con agua en una solución de 1:1. Podrás usar esta solución en superficies como cristales, ventanas, paredes, armarios, suelos, fregaderos, fogones y cafeteras.
Eso sí, hay que tener siempre en cuenta que una solución de limpieza con vinagre no es suficiente para superficies con un alto riesgo de contaminación alimentaria, como las tablas de cortar y los estantes o cajones del frigorífico. Para estos casos, se recomienda utilizar lejía.
Algo muy importante que debes saber, en este sentido, es que nunca debes combinar vinagre con lejía o peróxido de hidrógeno, ya que puede crear vapores tóxicos.
Por qué el vinagre sirve para limpiar y desinfectar
La ciencia sigue siendo un poco escasa sobre la eficacia del vinagre como desinfectante, pero ha habido un puñado de estudios que han demostrado que el vinagre tiene propiedades antibacterianas, especialmente cuando se trata de matar las bacterias en los alimentos durante la preparación de los mismos. Un pequeño estudio demostró que las reducciones o aliños de vinagre pueden tener efectivamente este efecto (y reducir la presencia de bacterias como la Salmonella) cuando se utilizan durante 15 minutos o más.
Cómo utilizar el vinagre de limpieza para desinfectar
Visto todo lo anterior y entendido el motivo que hace del vinagre de limpieza uno de los mejores desinfectantes naturales, veamos algunos trucos conocidos y otros menos conocidos para utilizarlo en la limpieza del hogar de forma efectiva.
Para dejar las toallas esponjosas
Por increíble que parezca, utilizar vinagre de limpieza a la hora de lavar las toallas es uno de los trucos más sencillos y efectivos que puedes llevar a cabo si quieres que salgan esponjosas y suavitas.
Bastará con que coloques en una arielita dos tercios de vinagre de limpieza y uno de detergente. A continuación, ponlas a lavar en tu programa de confianza. No eches suavizante (las puede estropear con el paso del tiempo). Confía en el proceso, quedarán como recién estrenadas.
Para limpiar la campana extractora por dentro
Este trucazo nos ha dejado anonadados. La campana extractora siempre acumula grasa inaccesible, sobre todo en el interior, por eso nos ha encantado esta idea tan sencilla como eficaz.
Sólo tienes que llenar una olla con una mezcla de agua caliente, vinagre de limpieza y limón y ponerla sobre el fuego, a máxima potencia. El vapor generado por la cocción hará que se se deshaga la grasa que rodea a los conductos de la campana, a la vez que desintegra la suciedad de las paredes interiores.
Limpia las ventanas con vinagre
En vez de gastar dinero en limpiadores de ventanas, especialmente en los que contienen químicos tóxicos o potencialmente tóxicos, ¿por qué no hacer uno propio?
Llena una botella de spray con una parte de vinagre blanco destilado y una parte de agua. Rocía sobre el cristal y usa un paño sin pelusa para limpiar las ventanas, y luego una gamuza para pulirlas hasta obtener un acabado brillante.
Si lo que quieres es quitar la cal, opta por mezclar bicarbonato con vinagre de limpieza, aplicar la mezcla sobre el cristal y retirar con un paño húmedo y agua.
Para quitar la marca que dejan los vasos en la mesa
Pon una bebida fría sobre tus muebles de madera sin usar posavasos y dejarás un recordatorio redondo para que no vuelvas a hacerlo.
Para quitar esta señal, moja un paño blanco en una mezcla a partes iguales de vinagre y aceite vegetal, y frota la mancha, frotando en el sentido de la veta.
A continuación, limpia la zona con un paño seco para que la madera brille. También puedes eliminar los anillos de agua de los muebles de cuero frotándolos con vinagre en un paño.
Para desinfectar esponjas y estropajos
Si buscas una opción un poco más natural, una buena inmersión en vinagre puro, que tiene una mayor concentración de ácido que el vinagre blanco normal, también servirá.
Retira cualquier partícula sólida y enjuaga y aprieta bien la esponja antes de introducirla en un recipiente con suficiente vinagre como para que quede completamente sumergida.
Déjala en remojo cinco minutos antes de enjuagarla y exprimirla. Consejo profesional: Utiliza guantes, ya que el ácido adicional de la esponja empapada en vinagre puede irritar la piel. (Además, este vinagre debe utilizarse explícitamente para limpiar, no para comer. No es seguro de digerir, y probablemente sepa fatal).
Para acabar con la cal en el baño
Con un atomizador, usa una mezcla de agua y vinagre de limpieza regularmente en tu baño para rociar azulejos, lavabos y grifos, enjuagándolos después con agua tibia.
Para eliminar la acumulación de cal en los grifos, envuelve un paño empapado en la solución de vinagre alrededor del grifo y déjalo toda la noche actuando. A la mañana siguiente, usa un cepillo de dientes viejo empapado en la solución para eliminar cualquier residuo restante.
Eso sí, no uses vinagre en los grifos enchapados, especialmente en los dorados, porque el ácido puede dañar el acabado.
Para los cabezales de ducha, vierte la solución de vinagre en una bolsa de plástico y fíjala sobre el cabezal de ducha con una banda elástica para que los orificios queden sumergidos en el líquido. Después de una hora, retira la bolsa y abre la ducha con agua caliente para enjuagar el cabezal de la ducha.
Para limpiar la cristalería
Si tienes vasos y copas arrinconados en la parte trasera de tu vitrina que evitas usar, recupéralos sumergiéndolos durante cinco minutos en vinagre de limpieza para eliminar las manchas turbias.
Sácale brillo a la vajilla
Si ves que el agua y el jabón no son suficientes para dejar la vajilla tan reluciente como te gustaría, echa un poco de vinagre a la mezcla y enjuaga bien para evitar el olor.
Si tienes lavavajillas, añade dos tazas de vinagre de limpieza en el fondo, y pon el programa con normalidad (incluyendo la pastilla o el jabón que uses habitualmente).
Además, el vinagre de limpieza también va genial para limpiar profundamente el lavavajillas y evitar malos olores. Coloca una jarra medidora de vidrio grande llena con dos tazas de vinagre de limpieza en la rejilla superior y, a continuación, pon a funcionar el lavavajillas en vacío sin la pastilla ni detergentes.
Cómo limpiar las cazuelas y sartenes con vinagre de limpieza
Muchas veces, aunque frotemos y frotemos la base de las ollas y las cacerolas, cuando se secan aparecen unas manchas horribles.
¿Cómo eliminarlas de forma sencilla? Echando directamente un chorrito de vinagre de limpieza que cubra por completo la base, y dejándolo actuar un mínimo de diez minutos (cuanto más tiempo, mejor).
Limpiar las juntas con vinagre de limpieza
Con el paso del tiempo las juntas de los azulejos se van desgastando y ensuciando debido a la humedad, grasa... y empieza a aparecer el moho, bacterias y otros microorganismos.
Diluye media taza de vinagre de manzana en media taza de agua y aplícalo con un cepillo. Deja actuar cinco minutos y limpia con un paño sumergido en agua caliente.
Cómo limpiar la cafetera con vinagre de limpieza
¿Sabías que el vinagre también sirve para limpiar a fondo tu cafetera? Solo tienes que combinar una parte de vinagre y dos de agua, y añadir la mezcla a la jarra del café llenando todo el depósito. A continuación, enciende la cafetera y déjala actuar hasta la mitad del programa. Apágala y deja que la mezcla repose entre media hora y una hora aproximadamente. Enciéndela de nuevo hasta que se complete el programa. Ahora, vacíala y lávala con agua y jabón en el fregadero.
Para quitar el olor a vinagre, vierte agua fresca en el depósito y enciende la cafetera. Repite el proceso si el olor persiste.
Evita los atascos en el fregadero
No hace falta que compres productos carísimos para desatascar: con un poco de vinagre y bicarbonato bastará para acabar con los restos de comida que se cuelen por el fregadero.
Haz la mezcla, verás cómo actúan ambos ingredientes entre sí. Deja actuar diez minutos y, para rematar, echa por el desagüe un poco de agua bien caliente (si es casi a punto de ebullición, mejor que mejor). Verás como desaparece el atasco.
Para limpiar la encimera y otras superficies
Encimeras, mesas, suelos, paredes, ventanas... Ten siempre a mano un pulverizador con vinagre y utilízalo para limpiar todas estas superficies. ¡El brillo que conseguirás será espectacular!
Pero que no se te ocurra emplearlo sobre materiales como el mármol, el granito o cualquier otro tipo de piedra natural, ya que el ácido del vinagre puede acabar con la superficie.
Para limpiar el WC
Quita los restos de cal del inodoro rociando el interior con una mezcla de media taza de vinagre blanco y el zumo de un limón. Deja actuar treinta minutos, limpia con la escobilla y enjuaga.
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