- Cómo lavar el bañador y el biquini de forma correcta para eliminar todas las bacterias sin utilizar la lavadora
- Estos son los 3 limpia tapicerías rebajados hoy para eliminar las manchas más difíciles de sofás, colchones y alfombras
- 3 robots aspiradores y friegasuelos con autovaciado muy rebajados en Amazon
El inodoro es algo que limpiamos casi sin pensar (o al menos intentamos no hacerlo) cuando nos toca hacer el baño en nuestra limpieza semanal. Nos ponemos los guantes de goma, repasamos la tapa, limpiamos el asiento y, finalmente, aplicamos un poco de lejía en la taza. Pero lamentablemente, eso no es suficiente. La orina residual y otras manchas (ejem) pueden acumularse debajo del asiento y alrededor del inodoro. Además, la cal y las marcas metálicas pueden hacer que la taza termine por tener un aspecto desagradable. Y es cuando descubre que tu limpiador de baño habitual parece inútil para darle a la taza o WC el aspecto que tenía cuando lo compraste
Por suerte, puedes limpiar a fondo tu inodoro y eliminar esas manchas más persistentes. Solo necesitas 5 pasos para que se vuelva a lucir y oler como nuevo.
1. Limpia todas las superficies
Aunque no sea una idea agradable, las manchas alrededor del inodoro son abundantes. No solo debajo del asiento: la orina también puede salpicar por el exterior de la taza y llegar al suelo. Si hay miembros masculinos en casa, incluso puede salpicar en las paredes y encimeras adyacentes.
Para darle una limpieza profunda a tu inodoro, empieza limpiando todas las superficies en torno a la taza con un limpiador antibacterial para baños, como Desinfectante Sanytol. Asegúrate de que sea adecuado para los suelos y encimeras. Usa agua tibia con jabón si limpias paredes pintadas y luego enjuaga con un paño húmedo.
Recuerda limpiar también la manilla de la cisterna; muchas personas tiran de la cadena antes de lavarse las manos, lo que puede hacer que esté cubierta de bacterias. Si tu inodoro está empotrado en la pared y suspendido sobre el suelo, puedes usar una mopa plana para limpiar por debajo.
2. Elimina las manchas del asiento
No hablamos de las típicas manchas del día a día. Si hay manchas "coloridas" debajo de la tapa y asiento que han teñido el plástico, requerirán un esfuerzo específico para eliminarlas.
La mayoría de los asientos y tapas de inodoro modernos pueden retirarse completamente al presionar un par de botones de liberación rápida. Levanta la tapa y el asiento y encontrarás los botones en la parte trasera y central del asiento, donde está unido a la taza. Presiona ambos botones hacia afuera simultáneamente y levanta al mismo tiempo para retirarlo. Luego, colócalo invertido sobre una toalla vieja para limpiarlo. Si tienes un asiento más antiguo que no se pueda retirar fácilmente, no te preocupes, también puedes limpiarlo a fondo estando fijo.
Consejo: si logras retirar la tapa de la taza, aprovecha para limpiar debajo de los soportes y eliminar la suciedad oculta.
Prepara una pasta espesa de agua y bicarbonato (unas gotas de agua deberían crear una consistencia espesa y pegajosa). Debe ser lo suficientemente densa como para adherirse y secarse en la superficie. Aplica directamente sobre las manchas y deja actuar durante 20 minutos. Revisa y vuelve a aplicar más tiempo si es necesario. Repite hasta que las manchas desaparezcan, luego frota, enjuaga y deja secar. Y ficha estos otros 23 trucos para usar el bicarbonato de sodio para limpiar en casa.
Consejo: el bicarbonato es ideal para asientos de plástico y esmalte. Para asientos de madera, utiliza agua tibia con jabón para evitar daños.
3. Elimina las manchas de la taza
Ahora es momento de ocuparse de las manchas persistentes que quedan en la taza misma. La cal escondida bajo el borde se puede tratar con una solución sencilla: una piedra pómez. Aunque son excelentes para eliminar piel seca, también son ideales para eliminar la cal sin dañar la superficie de porcelana del inodoro. Pero ten cuidado, usa piedras pómez únicamente en superficies de porcelana. Su abrasividad puede dañar accesorios de plástico y esmalte.
Puedes encontrar piedras pómez con mangos para un mejor alcance, aunque una piedra manual más pequeña con borde puntiagudo es ideal para limpiar debajo del borde. No apliques demasiada presión, ya que podrías dañar la superficie; simplemente sumerge la piedra en el agua y frota suavemente la cal hasta que desaparezca. Sigue mojando y frotando según sea necesario. Hace un ruido desagradable que te pondrá los pelos de punta, pero funciona.
Si hay marcas de metal en tu inodoro causadas por cepillos metálicos o desatascadores, la piedra pómez también puede ser útil para eliminarlas. En este caso, necesitarás vaciar primero el agua. Cuando termines, enjuaga la piedra pómez y luego déjala en remojo en un desinfectante durante 15 minutos.
4. Aplica cristales de soda
Tu inodoro debería estar reluciente a esta altura del proceso, pero aún no has terminado. El siguiente paso es realizar una limpieza profunda de las partes internas para eliminar restos de cal escondidos y eliminar malos olores. Para esto, necesitarás cristales de soda.
Simplemente vierte una taza de cristales de soda en el inodoro y déjalos actuar durante toda la noche. Luego, frota la solución alrededor de la taza con el cepillo del inodoro antes de tirar de la cadena. Puedes repetir esto una vez a la semana para mantener la cal bajo control. También hay tabletas que se pueden añadir directamente a la cisterna para descomponer la cal. Y si tienes problemas más profundos, descubre en este enlace, Cómo desatascar un inodoro en segundos si no tienes un desatascador.
5. Cómo limpiar la escobilla
Tu inodoro puede estar limpio, pero todo será en vano si vas a volver a limpiarlo con un cepillo lleno de bacterias.
Para darle una limpieza profunda a la escobilla del baño, empieza llenando el soporte con agua caliente y jabonosa. Remueve el cepillo sumergido en la solución. A continuación, vierte el agua en el inodoro y enjuaga tanto el soporte como el cepillo con agua limpia. Luego repite todo el proceso con agua fría y unas gotas de lejía (no uses agua caliente, ya que reduce la eficacia de los ingredientes. Deja en remojo en lejía durante 10 minutos antes de enjuagar ambos con agua limpia. Intenta limpiar el cepillo semanalmente para controlar las bacterias y reemplázalo al menos una vez al año.
En el futuro, deja el cepillo secar en la taza antes de guardarlo en el soporte; esto evitará que se acumule un charco de agua en el soporte y reducirá goteos en el suelo. Recuerda usar un limpiador de inodoros específico regularmente para mantener las manchas y la suciedad bajo control. Algunos también ayudan a prevenir la formación de cal.
The Inventions Emporium Escobilla de baño con dispensador de jabón
