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Todo el que tiene una casa pequeña entiende la importancia de optimizar cada centímetro de espacio. Y entiende, también, que hay cosas necesarias que son difíciles de encajar con la estética de la decoración.
Una de las principales claves de la Marie Kondo española a la hora de buscar el máximo orden en casas pequeñas es, precisamente, cuidar que cada cosa ocupe su sitio siempre. Así evitaremos al máximo el ruido visual. A veces es difícil.
Sobre todo si hablamos de la ropa sucia. Es cierto que las tiendas de decoración hacen cestos para la ropa de lo más estéticos: cestos de madera, de bambú o de mimbre que encajan a la perfección con la estética del hogar, sea cual sea el estilo que queramos darle. De hecho, hay cestos para la ropa pensados para cuartos de baño y otros, directamente, pensados para poner en el dormitorio (ideales para pisos de alquiler). Pero, aún así, muchas veces resulta algo difícil de encajar con la deco este accesorio, que es tan necesario para que la ropa sucia no se vea.
Así que, a sabiendas de esta problema y de la optimización en los espacios pequeños, Lidl ha puesto a la venta el cesto para la ropa más funcional que hemos visto nunca. Y es que está pensado para colgar detrás de la puerta, así que no ocupa espacio en el suelo de la habitación y, además, queda totalmente invisible, evitando que pueda resultar algo chocante con el resto de muebles.
El cesto para la ropa que menos se ve: así es
Hablamos de un cesto para la ropa hecho con material reciclado, totalmente flexible y blandito, por lo que no habrá problema en que quede entre la puerta y la pared cuando esta se abra. Está diseñado específicamente para lo que venimos describiendo: "Ahorra espacio para colgar en la puerta", dicen los creadores de Lidl. Y está disponible en el beige que te presentamos aquí, ideal para casas clásicas, y en verde menta, uno de los colores retro que han vuelto con fuerza este 2025. Este último nos parece ideal para casas modernas en las que se quiere mantener detalles vintage, o para casas de estilo mediterráneo.
Incluye dos ganchos metálicos para colgar en el marco de la puerta (siempre que este mida unos 1,8 cm de ancho), como si de dos mini perchines se tratase y, a su vez, colgar el cesto de ellos. Quedando como si fuera una percha de puerta.
Incluye varios bolsillos: uno grande en la parte superior y dos más pequeños en la parte inferior que, juntos, pueden albergar hasta 65 litros de ropa sucia, así que es un cesto bastante grande. Eso sí, todos se evacuan por el mismo lugar: en la parte inferior del cesto, se equipa una apertura con velcro por la que cae toda la ropa sucia sin necesidad de tener que descolgarlo de la puerta.
Además, este producto de Lidl es el claro ejemplo de que la funcionalidad no siempre está reñida con el precio: el gigante sueco ha rebajado un 20% su precio original. Ahora no pasa de los 4 euros, así que lógicamente, son muchas las personas en España que ya están haciéndose con él.