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Si hay algo que caracteriza la dieta mediterránea, además del aceite de oliva, las legumbres y el pescado azul, son las sobremesas. Ese pequeño gran placer de las comidas y cenas de fin de semana cuando después de comer, el momento del postre, café y una buena charla se prolonga hasta la hora de la merienda o más. Pero si hay algo que puede ensuciar ese momento son las migas que quedan en el mantel, así que para limpiar el mantel en ese momento de una forma fácil y rápida fichamos esta joyita que no puede faltar en tu comedor.
Ya desde hace siglos, se ha usado un mini cepillo y una pequeña y elegante paleta para recoger las migas y limpiar el mantel, y en muchos restaurantes te limpian el mantel antes de traer el postre. Pero ese mini aspirador va a cambiar las reglas del juego. Os pelearéis en casa por primera vez, para ver quién "pasa la aspiradora".
Se trata de la mini aspiradora de mano SILVERCREST para la mesa.
Este pequeño aspirador de mano tiene un cepillo en la parte inferior para barrer las migas y el polvo, y un recipiente colector muy fácil de limpiar. Funciona con pilas y tiene una forma ergonómica cuadrada con bordes redondeados que facilita el agarre. Es muy fácil de manipular y de limpiar.
Mide aproximadamente 8,2 x 8,2 x 6,4 cm, así que te será muy fácil manipularlo y podrás pasarlo por toda la mesa entre los platos y los vasos para dejar el mantel limpio antes de servir el café y los postres. Lo mejor es el precio, tan solo 5,99 €
Uno de esos gadgets que comprarás para ti, para tu familia y para todos tus amigos, porque por ese precio y con lo práctico y funcional que es, todos lo vamos a querer tener en casa. Está disponible en dos colores: beige y negro, así puedes diferenciar el que usas para las migas de la mesa del comedor y tener otro, por ejemplo, en la mesa de centro para repasar el polvo o las migas que dejan los niños en la merienda.
Podrás usarlo también para cualquier otro textil, por ejemplo para recoger miguitas que hayan caído al sofá. No intentes hacer una limpieza a fondo, pero vas a quererlo tener a mano siempre para recoger cualquier pequeño desaguisado.