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Los catálogos de las nuevas colecciones y de las colecciones permanentes de tiendas de muebles de diseño como IKEA, Maisons du Monde o Leroy Merlin nos demuestran que el espacio, en ningún caso está reñido ni con el diseño, ni con la estética de la casa, ni, por supuesto, con la necesidad de almacenamiento.
Son muchas las soluciones para almacenar todo lo que siempre tenemos por el medio y que ello no afecte de ninguna manera al estilo de decoración que queramos dar al resto del hogar.
A propósito de que cada vez somos más los que vivimos en casas pequeñas, estas y otras tiendas de decoración han lanzado muchos productos que son perfectos para mantener cada cosa en su sitio de forma bonita y sencilla. Y una de esas cosas que más ruido visual aporta la estética del hogar suelen ser los zapatos, que nos quitamos y nos ponemos al salir y al entrar en casa. Por eso, colocar un zapatero a modo de recibidor en la entrada, o tenerlo siempre a mano, es del todo útil.
Y un zapatero no necesariamente tiene que ser feo o poco estético: hemos seleccionado cinco modelos de tiendas que todos conocemos para que todo el mundo pueda hacerse con uno, tenga el estilo de decoración que tenga.
Zapatero de madera y frente de ratán, de Maisons du Monde
Este zapatero se mimetiza tanto con los muebles de diseño que prácticamente camufla al 100% su verdadera razón de ser. El ratán del frontal, la madera en color nogal de su estructura y sus tiradores estéticos y minimalistas hacen de él un mueble perfecto para colocar como recibidor en la entrada de casa y ordenar los zapatos para que queden recogidos en su interior.
Esconde dos baldas dobles para guardar hasta 12 pares de zapatos así que, pese a ser bastante estrecho (mide 60 cm de longitud) es ideal para dos o tres personas.
Zapatero estrecho con 3 solapas, de Leroy Merlin
Igual que el anterior, este mueble zapatero está también pensado para ser utilizado como mueble recibidor, pues su estética se presta 100% a ello. Tanto es así que, incluso, incluye una especie de superficie en la parte superior para dejar una lámpara, las llaves, un libro o, incluso, para utilizar como estantería.
La estructura está hecha en metal negro que, combinado con la madera en color roble de su frontal, hacen de él un zapatero perfecto para una casa de estilo industrial o para una de estilo clásico.
En su interior se esconden tres puertas abatibles con baldas dobles para poner hasta 12 pares de zapatos (o 15 si son pequeños).
Zapatero blanco, de Maisons du Monde
La estética retro o vintage también está disponible en el mundo de los zapateros. Este blanco, de Maisons du Monde, es claro ejemplo de ello. Tiene una estructura bastante clásica (ideal para casas con este estilo de decoración), está hecho en madera y una estructura con decoración en la parte alta que le aporta un aire sofisticado.
En el interior guarda dos estantes regulables para colocar zapatos de diferentes tallas (exactamente hasta 10 pares de zapatos). Y también cuenta con un sistema antivuelco para hacerlo más seguro.
Solo mide 54 cm de ancho, por lo que es genial para casas pequeñas.
Zapatero de madera de tres puertas
Si tienes muchos zapatos y un poquito de espacio para destinar al zapatero, este puede ser una opción perfecta. Nos gusta para colocar en un dormitorio, porque tiene una estética nórdica que no restará paz y tranquilidad a esta estancia de la casa. Así que, sobra decir que sea perfecto para una habitación infantil o juvenil (en las que sabemos que normalmente los zapatos suelen estar por el medio siempre).
Es uno de los más anchos de la lista, mide 60 cm, pero también uno de los que más espacio tienen en su interior: esconde tres baldas dobles para colocar hasta 18 pares de zapatos (tres en cada balda, o dos si son muy grandes).
Zapatero con tres compartimentos
Este zapatero de IKEA es, posiblemente, uno de los más conocidos y de los que más vemos en todas las casas pequeñas. Y es que, pese a su precio, también puede ser utilizado como mueble recibidor porque es bastante estético y sencillo.
Es el más barato de la lista pero, eso sí, hay que tener en cuenta que no tiene parte de atrás, así que sí o sí tiene que estar pegado a una pared.