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En las casas pequeñas, cada centímetro de espacio cuenta. A la hora de amueblar los pisos pequeños es necesario encontrar muebles que, sin aportar mucho ruido visual al resto de la decoración, tengan varios usos a la vez. Vaya, que sean de lo más versátiles y que vayan acorde al estilo que queremos dar al resto de la casa (ya queramos amueblar y decorar con un estilo rústico, nórdico, retro o clásico).
A sabiendas de que esto es muy importante, cada vez son más las tiendas de decoración las que diseñan muebles que parecen auténticas obras de ingeniería. Hemos visto muebles que en apenas unos centímetros (muchos no miden ni siquiera un metro) son capaces de albergar zapatos, servir como butaca e, incluso, como aparador. Te lo demostramos con el mini mueble multiusos de Maisons du Monde y ahora queremos volver a hacerlo con un mueble súper original (y barato) que Klast Home ha puesto a la venta.
Se trata de un mueble aparador que tiene armarios abatibles para guardar zapatos y, a su vez, tres baldas vistas para ordenar libros o revistas. Vaya, un zapatero – aparador – estantería todo en uno perfecto para un pasillo, una entrada, un salón e, incluso, para un dormitorio.
Y es que lo que más nos llama la atención del diseño original de este mueble son sus colores y los materiales de los que está hecho: madera en tono roble (uno de los más claritos) con un frente de rafia en la parte del zapatero que queda ideal en casas de estilo nórdico, clásico, rústico e, incluso, retro.
Todo lo que nos gusta del mueble zapatero con baldas de Klast Home
Este mueble es una idea de decoración perfecta para casas pequeñas porque apenas ocupa espacio (mide 80 de ancho) pero es lo suficientemente espacioso por dentro (mide 99 de alto): detrás de cada puerta abatible se esconden dos baldas dobles para colocar hasta ocho pares de zapatos en total (o diez si no son muy grandes) y cada una de las baldas para libros mide 19 cm de ancho y 24 cm de profundidad, por lo que son perfectas para colocar hasta diez libros en cada una de ellas.
Y, además, es una buena opción porque tiene varios usos y puede servir perfectamente como mueble de entrada a casa o para completar el mobiliario, por ejemplo, de un pastillo si lo colocamos debajo de un espejo redondo de mimbre.
Sus cuatro patas altas de madera le dan un aspecto retro que nos recuerda mucho a mueble tipo zapatero que está arrasando y que fue tendencia en los 70.
Lo mejor de este mueble es, sin duda, su precio: no llega a los 190 euros. Una inversión más que justificada si tenemos en cuenta todo lo que puede hacer por nosotros, vivamos o no en una casa pequeña.
