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Con sinceridad: ¿quién no dispone de una bayeta en casa? Era deducible. La razón recae en que esta tela que se caracteriza por su capacidad para absorber líquidos ha resultado señalada de manera unánime como un elemento básico para mantener limpio el hogar. Al fin y al cabo, es rara la superficie o la estancia de la casa para la que no resulte apta. Y es precisamente esa versatilidad, la que fomenta que se utilice en cualquier sitio y para cualquier ocasión sin distinción, lo que, como igual ya puedes deducir, no es precisamente lo más adecuado. Al menos, si utilizas la misma para diferentes estancias o para limpiar distintas superficies.
No obstante, si bien es cierto que las bayetas forman parte de los seis productos de limpieza esenciales que no te pueden faltar en casa, según los expertos, saber cómo y dónde utilizarla para lograr un magnífico resultado no solo te permitirá sacarle el máximo jugo, sino que, además, te permitirá mantener tu casa limpia por tiempo indefinido.
Enfatizando la necesidad de establecer todo lo que puedes limpiar y hacer con una bayeta de microfibra, la cuenta de decoración repleta de trucos de limpieza de Alicia Martínez ha dispuesto una publicación en la que comparte las claves que sigue para dejar impolutas una largo listado de superficies (desde los clásicos azulejos del baño y la superficie de los muebles hasta las paredes y los rodapiés) con los productos adecuados de limpieza y, por supuesto, una bayeta.
Trucos y claves para usar la bayeta de microfibra en distintas superficies con un resultado óptimo
Ya lleves a cabo una rutina de limpieza digna de una profesional o que, simplemente, procures seguir los 20 puntos clave para poner la casa a punto, es innegable que una de las superficies donde más se tiende a utilizar la bayeta es, precisamente, el baño. Y en caso de tener las paredes recubiertas de azulejos, este truco te va a resultar de lo más útil. Eso sí, no te olvides de disponer de buenas bayetas de microfibra como estas con más de 12.000 valoraciones.
Para ello, como bien matiza la publicación de Alicia Martínez, “con un poco de agua y un buen chorro de amoniaco con detergente” se pueden limpiar de manera eficaz los azulejos del baño. Con ello, además, se previene que se acumulen malos olores y humedad sobre las superficies.
Asimismo, para conseguir limpiar en su totalidad las paredes de azulejos, siempre puedes optar por el clásico palo de la escoba; te permitirá llegar al completo a toda la superficie.
¿Y los rodapiés? ¿Y las molduras? Bien, ya sea que dispongas en el baño de ellos o, simplemente, se posicione como la parte de la casa que menos sueles limpiar puedes abogar por el truco que recomienda, es decir, utilizar un coletero o goma para fijar la bayeta de microfibra en un palo e irlo pasando, ligeramente húmedo, por los diferentes rodapiés. Sencillo, pero, a la vista está, resulta superpráctico y eficaz.
Por otro lado, para limpiar, sin arañar o dañar la superficie de los muebles lacados, recomienda cocer a fuego lento dos cucharadas grandes de jabón y agua obtendremos una mezcla mágica que ayudará a que se mantengan limpios más tiempo.
Asimismo, al mezclar agua tibia, jabón y, si lo deseas, una cucharada de aceite esencial -por ejemplo, el aceite de árbol de té es una buena opción- puedes pasar las paredes y quitarle la suciedad sin dañar o quitar la pintura que las suele recubrir.
Por último, como bien se puede observar en la totalidad de la publicación, se recomienda abogar y disponer de trapos de distintas tonalidades para así evitar una posible contaminación cruzada, al equivocarnos a la hora de escoger uno del mismo color.
Paños de microfibra para limpiar en casa:
