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Cuando se trata de soluciones de limpieza caseras, el bicarbonato de sodio es un firme favorito. Mezclado con agua, crea una pasta espesa que es lo suficientemente abrasiva como para eliminar todo tipo de manchas difíciles. Mézclalo con vinagre blanco destilado y obtendrás una reacción química gaseosa que es excelente para disolver la grasa y la suciedad. Por si fuera poco, también es un desodorante natural.
Si quieres aprovechar al máximo el poder de limpieza del bicarbonato de sodio, a continuación enumeramos 21 de sus mejores usos. ¡Asegúrate de tener siempre a mano este elemento básico!
21 problemas de limpieza que puedes solucionar con bicarbonato de sodio
1. Tuppers y envases de comida de plástico manchados y malolientes
Las fiambreras y los recipientes de comida se manchan fácilmente, ¡especialmente has guardado algo con salsa de tomate! Para limpiar los recipientes, lávalos con una esponja limpia espolvoreada con bicarbonato. O elimina las manchas difíciles sumergiéndolas en una solución de 4 cucharadas de bicarbonato y un litro de agua tibia.
2. Una nevera con mal olor
No hay nada peor que abrir el frigorífico y recibir un olor desagradable. Un bote pequeño de bicarbonato en la nevera absorberá los olores fuertes de la comida para que no permanezcan ni afecten el sabor del resto de alimentos.
3. Desodoriza tu lavavajillas
El bicarbonato también puede ayudarte a eliminar los malos olores del lavavajillas; simplemente espolvorea un par de cucharadas en la base, déjela durante al menos 15 minutos y luego ejecuta un ciclo normal en vacío.
4. Una cocina sucia
Casi todos los puntos sucios de tu cocina pueden limpiarse con bicarbonato. Mezclado con agua, puedes utilizarlo para limpiar encimeras, fregaderos de acero inoxidable, microondas, campanas extractoras y utensilios de cocina.
5. Platos y sartenes muy grasosos
Mezcla tu lavavajillas habitual con bicarbonato para limpiar sartenes, ollas e incluso platos para lavarlos y eliminar olores y restos de la comida.
6. La puerta del horno
Cuando tienes que limpiar el horno, la mayoría de los limpiadores químicos para hornos no son adecuados para la puerta de cristal. Por suerte, el bicarbonato de sodio viene al rescate. Simplemente mézclalo con agua para hacer una pasta y luego aplícala por toda la puerta. Déjalo toda la noche y límpialo por la mañana. Prueba primero en una zona discreta para asegurarte de que el bicarbonato no raya el vidrio.
Esta es una solución muy útil para las manchas leves, pero las manchas más intensas pueden necesitar algo más fuerte, como el limpiador de vidrios para estufas HG.
7. Limpiar las manchas de té y café
¿Tus cucharillas están manchadas por el café y el té? Coge el bicarbonato y mezcla 2 cucharaditas con un poco de agua para hacer una pasta suelta. Frota la mezcla en el área manchada con un paño suave, enjuaga y seca.
8. Tapicería y alfombras
Desodoriza los muebles tapizados, alfombras y tapetes espolvoreando con bicarbonato, déjalo reposar durante 15 minutos y luego aspíralo.
9. Las camas de tus mascotas
¡Lo mismo ocurre con el lugar favorito de Snoopy! Espolvorea, espera 15 minutos y aspira bien.
10. Juguetes sucios
Combate las manchas de las manos sucias de tus pequeños limpiando los juguetes con una esponja humedecida en una solución de bicarbonato de sodio y agua.
11. Una pared pintada con crayones
Cuando los esfuerzos artísticos de tu hijo acaban por toda la pared, frota ligeramente con una esponja húmeda espolvoreada con bicarbonato.
12. Ropa sucia
Tanto la ropa blanca como la de color saldrán más brillantes de la lavadora si añades 200 g de bicarbonato a tu carga. Combinado con detergente líquido, ayuda a equilibrar los niveles de pH para dejar la ropa más limpia.
13. Moho en el baño
Frota la bañera, los azulejos, el lavabo y la cortina de la ducha con una esponja húmeda y bicarbonato. Enjuaga para dejar todas las superficies brillantes.
14. Lechada
Y los usos en el baño no terminan ahí. También se puede utilizar una pasta de bicarbonato de sodio para limpiar la lechada. Simplemente aplícalo en las áreas manchadas con un cepillo de dientes viejo y luego rocía vinagre blanco destilado encima. La reacción química ayudará a eliminar las manchas antes de frotarlas.
Aplica un spray sellador una vez que la lechada esté limpia y seca para protegerla mejor en el futuro, como HG Wall & Floor Grout Protector.
15. Limpiar un desagüe
Mantén los desagües limpios y libres de malos olores vertiendo 125 g de bicarbonato seguido de 125 ml de vinagre. Cúbrelo con un paño húmedo, espera cinco minutos y luego enjuaga con agua caliente.
16. Ropa de deporte maloliente
Refresca tu kit de entrenamiento después de tu sesión de gimnasio espolvoreando un poco de bicarbonato dentro de los zapatos y, de paso, ¡en la bolsa de gimnasia! Simplemente sacude antes de usarlos nuevamente.
17. El olor de los cubos de basura
Esparce un poco de bicarbonato en el fondo del contenedor de basuras para combatir los olores antes de colocar una bolsa nueva.
18. La parrilla de la barbacoa
Combate la suciedad del verano rociando un poco de bicarbonato en el cepillo de limpieza de la parrilla antes de fregarla. Y echa un vistazo a estos trucos para limpiar la barbacoa para que quede perfecta.
19. Muebles de jardín sucios
Antes de sacar las sillas de jardín de plástico, límpialas con bicarbonato y agua. Y antes de guardarlas al final de la temporada, coloca bicarbonato dentro de las bolsas de almacenaje de los cojines para mantenerlos frescos.
20. El armario de la ropa de hogar
Al igual que en el frigorífico, una caja abierta de bicarbonato colocada cerca de las sábanas y toallas puede combatir el olor a humedad.
21. Joyas sucias
Cuando la plata esterlina deja de brillar, elimina el deslustre haciendo una pasta (tres partes de bicarbonato por una parte de agua). Aplícalo con un paño sin pelusa (no una toalla de papel, que puede rayar) y enjuaga.