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Los mejores consejos para llevar al gato al veterinario y que no lo pase mal

¿Qué hago si mi gato no quiere ir a la clínica veterinaria? Los mejores trucos para reducir el estrés y que no se ponga agresivo.

Por Jen Reeder
trucos para minimizar el estrés del gato en la visita al veterinario

Si temes tener que llevar a tu gato en coche, no eres el único. Y es que, muy a pesar de los gustos y preferencias de nuestros gatos, necesita cumplir con su calendario de visitas al veterinario, además de acudir cuando se encuentre enfermo, por supuesto. Pero tenemos la solución para poder llevarlo al veterinario sin que se estrese demasiado (y que no te estrese a ti): tienes que aprender a pensar como un gato, porque con una visión empática de su mundo vas a comprender mucho mejor sus reacciones. Para empezar, echa un vistazo a esta práctica guía para saber el significado de los ronroneos felinos y empezar a conocer a tu gato.

Qué hago si mi gato no quiere ir al veterinario

Los gatos nos dan muchas alegrías, por si lo dudas te damos 20 razones para tener un gato en casa. Cuando descubras todas las ventajas, vas ser más feliz, pero también tienes ciertos compromisos que debes adquirir, como respetar su espacio, sus tiempos, sus pertenencias y, sobre todo, aprender a quererle. Un detalle muy importante es no traspasar nuestras emociones a nuestras gatos. Ya sabrás que si estás estresado porque tienes que llevar a tu gato al veterinario, y ya imaginas que no va a ser fácil, es muy probable que el gatito también sufra la ansiedad antes, durante o después del trayecto. Intenta naturalizar cada momento, pero si te falta experiencia o no eres muy hábil, estos consejos que hemos preparado te serán de gran ayuda.

Los gatos de compañía superan en número a los perros, pero reciben muchos menos cuidados veterinarios. En España, se registraron cerca de seis millones de gatos como animales de compañía, así que puedes imaginarte todos esos felinos malhumorados porque tienen que hacer la visita de rigor al veterinario y el momento crítico que pueden pasar sus dueños.

El principal problema es que a los gatos no les gustan los cambios, así que si sólo ven salir su transportín cuando llega el momento de subir al coche, puede ser cuando tienes una mudanza, si sales de vacaciones o simplemente cuando le llevas a la clínica veterinaria. Los gatos se asustan y pueden esconderse, pero también ponerse agresivos: arañar o morder. Por eso, el secreto para viajar sin estrés es acostumbrarlos al transportín antes de salir de viaje.

Cómo llevar el gato al veterinario:

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Busca un sitio fijo en casa para el transportín

cómo meter al gato sin estrés en el transportín
getty images

A menudo se comete el error de colocar el transportín, incluso el arenero, cerca de una lavadora ruidosa o en un lugar de paso en la casa. Busca un lugar donde se sienta seguro o un buen escondite para colocar el transportín, mantenlo abierto para que sea siempre accesible, incluso bien calentito y con recompensas cerca, así lo verá como un refugio.

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Cómo hacer que el gato entre en el transportín

trucos para minimizar el estrés del gato en la visita al veterinario
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Crea un vínculo con el transportín. Pon en el interior una prenda de ropa que huela a ti, además de una colchoneta cómoda. También puedes incluir algunas golosinas para mascotas.

Una vez que el gato empiece a acercarse al transportín, juega con juguetes de caña de pescar o punteros láser alrededor y, eventualmente, dentro del transportín. Es esencial recordar que los gatos responden mejor a las recompensas y los elogios que a los castigos.

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Elige un transportín seguro para tu gato

trucos para minimizar el estrés del gato en la visita al veterinario
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Cualquiera que haya intentado conducir con un gato suelto en el coche sabe que no es una opción segura, porque les gusta esconderse bajo el pedal del freno, además pueden provocar otras distracciones peligrosas.

Es fácil que se escapen mientras los transportan entre el coche y su destino y se pierdan. Así que busca un transportín acolchado y rígido, que se abra por delante y por arriba, y que sea lo bastante pequeño para caber en el suelo del coche. El lugar más seguro para colocarlo es detrás del asiento del conductor.

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Acostumbra a tu gato a hacer viajes cortos

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Para reducir la estimulación, lo más indicado es cubrir el transportín del gato con una manta o toalla cuando camines hacia el coche.

Puedes empezar con un recorrido muy corto, como una vuelta a la manzana o el trayecto a casa de un amigo cercano. Te recomendamos poner en el coche música relajante o hablar a tu gato de forma muy suave. Poco a poco, podrás aumentar la duración de los trayectos.

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Qué hago si mi gato tiene náuseas

gato en el veterinario
getty images

Pregunta a tu veterinario sobre la medicación para las náuseas o para reducir la ansiedad. Si tu mascota es muy asustadiza, busca una clínica veterinaria que tengas técnicas especiales para manipular animales o que utilicen difusores con hormonas de olor felino.

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Pon un collar identificativo a tu gato

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Los gatos tienen que llevar siempre collares ajustados, como mucho deberían caber dos dedos bajo el collar con etiquetas de identificación.

Asegúrate de ponerle un microchip a su gato y de registrar su información de contacto. También conviene contratar un seguro para tu mascota para cubrir algún accidente inesperado en casa o emergencias durante vuestros viajes.

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Ten paciencia con tu gato

trucos consejos dueños para cuidar mascotas
Blanca del Río

Cuando tu gato se siente seguro, sano y feliz es más fácil de convencerle para realizar la visita al veterinario. Tienes que crear unvínculo positivo con tu mascota, que puedes observar si te fijas en la postura que tiene tu gato cuando duerme en tu cama.

Premia sus avances y sus buenos comportamientos y aprende a divertirte con tu gato. Pero, sobre todo, deja que de rienda a suelta a sus insintos, porque necesita esconderse y cazar...