8 usos de la sal que seguro no conocías

Echa un puñadito de sal (si es gruesa, mejor) en la sartén, y agrega un poco de agua hasta que se forme una pasta. A continuación, frota la mezcla con un paño de cocina. De este modo conseguirás despegar los restos de comida. Aclara, seca, y ya lo tienes.

Si quieres deshacerte rápidamente del olor a pescado de las manos, sumerge una rodaja de limón entre la sal y frota tus manos con la mezcla. Después, aclara las manos con agua y disfruta del olor a limpio.

Sí, las planchas también deben limpiarse. Para ello, puedes rociar un poco de sal en un trozo de papel y pasar la plancha caliente sobre él. Cuando hayas terminado y la plancha se enfríe, límpiala con un paño para eliminar cualquier residuo.

Utiliza medio limón y un poco de sal para limpiar las tablas de cortar de madera. Deja reposar la mezcla durante unos minutos, raspa la suciedad y luego aclara.

Para decirle adiós a las manchas de sudor de la ropa, disuelve cuatro cucharadas de sal en un litro de agua caliente, después, sumerge una esponja en la solución para quitar las manchas. ¡Listo!

Añade 4 cucharaditas de sal, una taza de hielo picado y una cucharada de agua en tu cafetera de vidrio, y agita la mezcla para acabar con las manchas. Después, enjuágala con agua, pero asegúrate de que la cafetera esté a temperatura ambiente antes de limpiarla.

Para limpiar la bañera a fondo de manera natural, corta un pomelo por la mitad y espolvorea la parte superior con sal. ¡Ya tienes tu ''esponja'' de limpieza!

Si has derramado vino tinto sobre la alfombra, ¡date prisa! Mientras aún esté húmeda, echa bastante sal de mesa sobre la mancha, la sal ayudará a sacar el vino de las fibras de la alfombra. Una vez que ya no absorba más líquido, pasa la aspiradora.