Qué necesitas para montarte un home gym y empezar a hacer ejercicio

Elige tu ritmo, pulsa el botón y, ¡comienza la carrera! Recorre unos cuántos kilómetros cada día desde el salón. Para hacer más agradable el paseo, ubica la cinta de correr cerca de un ventanal con vistas al exterior. Y en verano, sácala a la terraza para sentir el aire en la cara. En el running, tú marcas tus tiempos. Practícalo a diario para quemar grasas y notarás cómo mejora tu resistencia en poco tiempo.

Junto a la cinta de correr es la máquina cardiovascular más utilizada para quemar calorías. Elige un diseño plegable que puedas ocultar bajo la cama.

Ejercítate con el calzado adecuado, que te sujete el pie.

Saltar la cuerda es un ejercicio muy sano. Practícalo 10 minutos al día.

Ponte los guantes adecuados y suelta adrenalina con un saco de boxeo. Si no tienes un lugar para dejarlo a la vista, guárdalo en el armario. Esta bolsa de poliéster se convierte en saco de boxeo con un doble uso: practicar el gancho y guardar la ropa sucia antes de pasar por la lavadora.

Al trabajar con fitball se ejercitan los músculos principales y esenciales para la estabilidad y la buena postura. Piensa que para practicar ejercicios de suelo necesitas un lugar donde dejar la pelota.

Yoga, pilates, estiramientos, abdominales... Son varias las razones para tumbarse a practicar deporte. Hazlo sobre una estera que quede recogida dentro del armario cuando termine la sesión.

Con agua o bebidas isotónicas que ayuden a recuperarte tras el esfuerzo.

Los ejercicios con pesas deben realizarse en series de repeticiones para alcanzar un grado leve de desarrollo muscular. Tonifica los brazos con unas mancuernas.

El deporte no está reñido con el diseño. Customiza la plataforma vibratoria como prefieras y reafirma los músculos sin esfuerzo con 15 minutos al día.