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23 ideas para elegir cortinas y estores, según cada tipo de ventana
Acertar con el estor o cortina adecuada para cada ventana no sólo depende de la tela o del estilo decorativo que desees lograr; además, debes plantearte para qué lo necesitas y, por supuesto, las medidas, el diseño y el tipo de ventanal.
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Las ventanales son nuestros miradores hacia la calle, nos dejan ver sin ser vistos y hablan de nuestros gustos. Para empezar, tienes que calcular su tamaño, porque no es lo mismo cubrir ventanas pequeñas con textiles que saber vestir los grandes ventanales.
Recurre a varios estores que puedas abrir o cerrar por separado, en función de tus necesidades. Ten en cuenta que un gran estor único para un frente tan largo como éste sería muy difícil de manejar; en su lugar, instala varios estores que no midan más de 1,50 m de ancho cada uno. Además, conviene que optes por modelos plegables —se recogen mediante varillas horizontales colocadas entre la tela—, ya que el aspecto rígido que presentan cuando están recogidos es el más indicado cuando se trata de superficies acristaladas más amplias de lo habitual.
Elige telas que pesen poco y pon mucha atención en calcular las medidas antes de encargar tus estores, haz tus propios cálculos. Mide el ancho y el largo de la ventana y añade 10 cm al ancho, para los dobladillos laterales, y 30 cm, para el dobladillo inferior y cubrir el soporte de madera.
Cómo elegir cortinas para cada ventana
Combina un estor de lino que aporte ligereza y frescura con una cortina gruesa que proporcione privacidad. Asegúrate de lograr una buena caída —ésta depende del tipo de frunce y, sobre todo, de los metros de tela utilizados— y deja que las cortinas arrastren unos centímetros por el suelo. Además de ser más elegantes, protegen mejor de las corrientes de aire. Otro elemento que da prestancia es el forro, que queda más vistoso si se elige de una tela contrastada. Estos son los estilos y formas de colgar las cortinas de forma práctica y bonita.
Lo que más determina el efecto de una cortina o un estor es la tela con la que se ha confeccionado. Antes de decidirte, pide en la tienda retales de las telas que más te gusten y apóyalas junto a la ventana para comprobar cómo filtran la luz y si combinan con la decoración de la estancia. También es importante que compruebes el efecto de la tela de noche y con luz artificial, pues puede sufrir variaciones importantes.
Modelos y tipos de cortinas
Aunque tus ventanas se abran hacia dentro, no tienes por qué renunciar a los estores. Lo único que debes valorar es que entre el techo y el marco superior de la ventana quede espacio suficiente para que cuando estén plegados puedas abrir las ventanas sin problemas: de 4 a 6 cm, si son plisados; de 12-13 cm, los enrollables, y de 25-30 cm, si son plegables.
El screen es un tejido hecho con fibra de vidrio o hilo de poliéster recubierto de PVC, que aísla del calor pero no impide el paso de la luz. No se arruga y resulta ideal para confeccionar paneles verticales o estores. De día, su entramado permite ver el exterior sin que te vean. Su estética y su diseño lo hace apto para decoraciones actuales y muebles de diseño. Hay muchas opciones para decorar tus ventanas perfectas, incluso los paneles japoneses.
Los cubre radiadores se convierten en un elemento decorativo para conseguir un ambiente acogedor y disimular el obstáculo que supone el radiador. Su situación puede plantear un problema, ya que muchas veces el radiador sobresale e impide que las cortinas lleguen hasta el suelo. Para corregir este inconveniente, una buena solución es camuflarlo con cubre radiador, que se convierte en una práctica repisa o colocar unos estores o visillos hasta el alféizar de la ventana. A los lados, cuelga unas vistosas caídas que lleguen al suelo. Si lo prefieres, también puedes recoger los cortinajes con unas abrazaderas.
Cortinas de macramé
Para un ambiente boho, nada como el macramé. Atrévete con unas cortinas de macramé, lograrás crear una barrera de luz sin perder luminosidad al mismo tiempo que le das a tu salón un ambiente súper bonito.
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Cortinas eléctricas
Para las ventanas en el techo, VELUX ha desarrollado mecanismos que nos hacen la vida más fácil. Las cortinas eléctricas son muy silenciosas y la solución para cuando las ventanas no quedan al alcance de la mano. LAs puedes abrir y cerrar a mano pero también desde la App de VELUX.
Nuevos lunares
Estas cortinas de lunares sobre fondo azul quedarán preciosas en ambientes minimalistas ya que añaden el punto justo de dinamismo y color.
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Cortinas con tejidos gruesos o visillos
Los espacios se enriquecen con textiles para dar más calidez. Los visillos ayudan en la gama cromática para el cambio de estación. Cuando tengas este tipo de ventanales grandes, podrás optar por tejidos ricos y con gran gramaje, aunque los visillos ligeros son un tránsito natural hacia el exterior, como muestra esta atmósfera de La Redoute Interieurs.
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Un neutro infalible
Las fibras naturales, además de encajar con cualquier propuesta decorativa, son fáciles de combinar. Por eso, en estancias decoradas con papeles estampados, los estores de yute son una opción segura. Los de este salón son de Deco & Living.
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Riqueza visual
Las habitaciones infantiles permiten más licencias decorativas que el resto de estancias. Aprovéchate y elige el mismo estampado para el papel pintado, las cortinas y la ropa de cama. Para que el resultado no acabe siendo soso o monótono, juega con dos colecciones distintas y aligera con detalles lisos. Papeles pintados y telas de algodón, de Laura Ashley.
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Mezclar, sin recargar
La clave para acertar a la hora de combinar el print de las cortinas con otras telas estampadas de la estancia es que los motivos sean de la misma proporción o que compartan una gama de color. Cortinas confeccionadas con lino Panay de la colección Mindanao de Pepe Peñalver.
Con personalidad
Los grandes estampados no tienen por qué resultar visualmente muy pesados: elige una tela con base neutra y motivos en un solo color. Ésta, mezcla de lino y viscosa, es el modelo Anaar Tree, de la colección Caspian de Sanderson, que distribuye Gancedo.
Tejados inclinados
Las cortinas venecianas proporcionan intimidad y permiten el paso de la luz natural. Si se desea disfrutar de las vistas al exterior, basta con plegar la cortina o girar las lamas. Este modelo, de la firma danesa Velux, cuenta con un exclusivo mecanismo de control.
Realzar un mirador
Una forma original y atractiva de vestir un mirador o una galería es combinar dos estores coordinados. Es una alternativa a la tradicional combinación de cortina y visillo, que también permite recrear ambientes elegantes. Para ello, es fundamental acertar con los coordinados. Una apuesta segura es jugar con un único color en dos tonalidades distintas, como arena y chocolate. Procura que el que da al exterior sea liso, de lino o algodón, y de un tono claro que resista bien la luz.
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Falsas apariencias
A simple vista parece un estor recogido, pero en realidad se trata de dos telas que se han cosido para crear este efecto. Esta propuesta es una solución perfecta cuando no queremos renunciar a unas bellas vistas o para estancias, como la cocina, donde la tela está expuesta a salpicaduras y manchas.
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Para habitaciones pequeñas
En estos casos, la mejor opción es un único estor de un tejido vaporoso, como el lino o el algodón. Para que resulte aún más ligero, opta por uno tipo pachetto, muy similar a los plegables pero que, al no llevar varillas, sus pliegues no resultan tan rígidos ni tensos. Si quieres ocultar el método de sujeción, coloca una galería. Ésta debe ser más ancha que la ventana —unos 15 cm por cada lado— y conviene tapizarla con una tela que coordine con la del estor.
Contraventanas
En casas antiguas, de techos altos y contrapuertas, opta por vestir sólo la acristalada. Elige unos visillos ligeros que dejen pasar la luz. Para dar protagonismo a las puertas o ventanales, escoge una tela con grandes estampados y colores atrevidos, que contrasten y armonicen con la carpintería. Fíjala en el marco superior de la puerta y asegúrate de que una vez colgada no impedirá el cierre de la contrapuerta. Algodón Paraskeva, de Designers Guild; en 1,37 m de ancho.
En la cocina crea un punto focal
Para la cocina, crea un punto focal. Escoge un estampado caprichoso para llamar la atención sobre la ventana de la cocina. Aquí, Gancedo crea contraste con un estampado floral contra paredes en gris oscuro y muebles de cocina en gris claro.
Para la cocina escoge estores fáciles de limpiar.
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Para un rincón bonito
Si tienes una bonita ventana al exterior que has convertido en un rincón casi decorativo, lo mejor es buscar la teatralidad con unas cortinas largas que puedas recoger en un elegante nudo, y un tejido fino como el lino.
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Pensando en los peques de la casa
En las habitaciones infantiles resultan perfectas las telas frescas de algodón de alegres colores o con motivos infantiles. Mejor los estores, pues son más prácticos y crean un efecto más ligero. Dormitorio con telas de la colección Pepino, de Scion de venta en Pepe Peñalver.
Ventanas en cuarterones
Si tienes una pared entera que es una ventana en cuarterones, igual puedes atreverte a utilizar ambas opciones, estores y cortinas. Eso sí, en tonos claros para que no le resten luminosidad al espacio. En este dormitorio, la interiorista Cristina Gamiz vistió el ventanal con estores y caídas confeccionadas por Margarita Ventura con una tela de Gastón y Daniela. Cama y mesilla, de Poliform.
Un rincón esquinero, mejor con cortinas
Y si le quieres dar un toque alegre entonces apuesta por un color explosivo pero elegante. Si tienes una esquina con una doble ventana, el efecto de la cortina siempre será más elegante y permitirá más juego. Nos encanta esta combinación en blanco y azul.
Con techos altos, tira por lo alto
Otra de las elecciones que sí o sí tiene que ser cortina es cuando nos encontramos con una altura considerable en los techos. Ahí tienes que jugar con cortinas, y si te atreves, romper la simetría de la ventana y hacer que caigan desde más arriba de esta, de forma que al cerrarla se convierte casi en un telón. El grosor depende de cuánto quieras aislarte de la luz que penetra.
Un estor de bambú siempre es buena idea
Y nos atrevemos a decir que es aplicable a cualquier estancia. Las fibras naturales matizan la luz de una forma única. Y si la cocina es blanca el contraste del color del bambú añade un toque cálido a la estancia.
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