El primer paso en cualquier proyecto de interiorismo suele ser el mismo: decidir el color. Aunque parece algo sencillo, esta elección determina absolutamente todo lo que vendrá después. Según el color que escojamos podemos lograr que un espacio parezca más amplio, que una habitación interior cobre una luz especial, e incluso fomentar un estado de ánimo relajado o más enérgico. La interiorista Natalia Zubizarreta lo tiene claro, y por ello, ha encontrado en las posibilidades cromáticas de Jotun a su mejor aliado. ''Las herramientas de Jotun me facilitan el trabajo, ya que consigo que el cliente, al ver esos colores aplicados, se anime a cambiar y atreverse. Como interiorista, es una forma de proponer color, de convencer a los clientes que tienen miedo al cambio'', explica.
Y es que este miedo al color es algo muy común. ¿Quién no ha acabado pintando de blanco por temor a equivocarse? Para solventarlo, cada año Jotun lanza una carta de tendencias cromáticas a nivel mundial.
Este 2025, la carta recibe el nombre de Nuances, una colección de 30 colores ordenada por seis familias –azules, grises, duraznos, amarillos, beiges y verdes– que celebra los pequeños detalles del día a día, porque aunque puede parecer que son las cosas grandes las que nos atraen, a menudo son las pequeñas las que tienen un impacto más profundo. Del mismo modo, el color afecta a nuestras emociones y estado de ánimo, nos calma o nos da energía, nos hace pensar o nos impulsa a actuar.
Este año, además de la carta de colores, la empresa noruega ha lanzado, específicamente para los interioristas, Interior Colour Collection by Jotun, una exclusiva colección de 900 colores organizados en cinco tacos según sus tonalidades. ''Para mí es perfecto poder tener esta amplia variedad de colores, ya que me ayuda a conseguir el color ideal'', dice Natalia.
Sin embargo, el verdadero desafío no es elegir un color bonito para una pared, sino lograr que todo –muebles, textiles, elementos decorativos– tenga coherencia. ''Con Jotun, no hay prácticamente límite de color. En su base de datos tienen más de 250.000 tonos para distintos tipos de superficies'', cuenta Natalia. ¿Y qué significa esto en la práctica? Según la interiorista, una libertad que antes no tenía. ''Puedo conseguir el mismo color exacto no solo en paredes, sino también en madera, metal, PVC y más superficies. Esto implica que puedo ajustar la tonalidad que mejor combina también con el estilismo que elijo para mis interiores''.
Pero más allá de las posibilidades creativas, hay una cuestión que preocupa a cualquier profesional: la durabilidad. Un espacio puede quedar precioso el día de la entrega, pero, ¿cómo estará meses después? ''Los interioristas podríamos ser 'víctimas' de la posventa si no utilizamos material de calidad para dejar a nuestros clientes sin palabras y evitar quejas. Por esta razón, los productos premium son clave'', reflexiona Natalia. ''Utilizo los colores y pinturas de Jotun porque, aparte de tener una variedad increíble de tonalidades, los colores, una vez aplicados, son de alta calidad, con lo que son resistentes a largo plazo''.
''Como interiorista, me da la seguridad de no recibir reclamaciones, de tener un cliente satisfecho que me recomendará para futuros proyectos. De esta forma, consigo ofrecer una experiencia superior al cliente, con una posventa impecable''.
Al final, el color no es solo una cuestión estética, sino una herramienta práctica para transformar espacios y, por extensión, vidas. Porque como sugiere la colección Nuances, a veces son los pequeños detalles, esos matices casi imperceptibles, los que realmente marcan la diferencia.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).