La facialista y terapeuta Yvette Pons ha hecho viral este vídeo con un masaje del rostro con dos cucharas. La terapeuta es especialista en tratamientos manuales para retrasar el envejecimiento, fomentar la energía y aumentar el bienestar. Es un #beautytip facilísimo, así que sigue estas pautas, porque ¡no hay excusas!
Estos movimientos van a conseguir drenar el sistema linfático del escote, el cuello y el rostro, además de estimular el riego sanguíneo y la oxigenación de todos los tejidos. Con la práctica constante se remodela el óvalo facial y, tanto los pómulos como las cejas, consiguen elevarse. Si tienes líneas de marioneta observarás cómo se suaviza el surco nasogeniano y también tendrás buenos resultados para mejorar la papada.
¿Por qué lo necesito? Porque los años y el estrés hacen mella en el tejido conectivo de nuestro cuerpo. En el rostro, las fascias se acortan y acumulan toxinas, el mayor enemigo de una piel joven. Activa la luminosidad de tu piel y acaba con el descolgamiento realizando este automasaje a diario o, al menos, tres veces por semana.¡Empezamos!
Paso 1. Solo necesitas un par de cucharas soperas de tu menaje, que tienen que haber pasado unos minutos en el congelador o el frigorífico para mejorar el resultado del masaje. Aplica en el rostro sérum o aceite vegetal, pero solo un poco de producto para que no resbalen las cucharas.
Paso 2. Los masajes mejoran la nutrición de tus fascias, empieza desde la parte baja del cuello y arrastra las cucharas desde la zona de la nuez, en el centro, hasta los lóbulos de las orejas.
Paso 3. Sujeta la mejilla con una de las cucharas y, con la otra, traza un círculo alrededor de los labios. Alterna los movimientos, desde el pómulo izquierdo hacia la boca y luego desde la parte derecha del rostro.
Paso 4. Coloca ambas cucharas en las comisuras de los labios y desliza suavemente la parte cóncava por el nurco nasogeniano. Sigue la ruta por el hueso que rodea el párpado inferior hasta llegar a las sienes (en la parte alta de las orejas). Desde aquí, baja por los laterales mientras dibujas los músculos esternocleidomastoideos hasta llegar a la base del cuello.
Paso 5. Continúa por las bolsas de los ojos, desde la nariz hacia las sienes, y marca después el arco de las cejas con la parte superior de las cucharas. Termina el óvalo facial al recorrer la línea del nacimiento del pelo, desde el centro hasta la base del cuello, con un suave movimiento por los laterales.
Repite tres veces cada movimiento del vídeo para completar el ritual, que durará entre 5 y 7 minutos. El siempre tesón tiene buenos resultados.
Belinda Guerrero es redactora digital especializada en decoración, arquitectura e interiores en Nuevo Estilo, aunque también escribe contenidos sobre jardinería, bienestar o mascotas. Le interesa la economía circular y la ecología, pero también las tendencias del interiorismo y encontrar trucazos para ahorrar tiempo o energía y conseguir vivir todos mejor en un entorno más sostenible. En la web de Nuevo Estilo también hace guiños al star system cuando bucea en las casas de los famosos españoles y de las celebrities con más seguidores en redes sociales. Belinda tiene una larga experiencia como periodista y también ha sido diseñadora gráfica, así que puede decir que ha ejercido en casi todos los frentes de la prensa, desde agencias de noticias hasta diarios y revistas, donde ha tenido la suerte de participar en el lanzamiento de grandes proyectos brillantes en los grupos de comunicación más importantes de España. También ha trabajado en producciones de moda, organización de eventos y en el departamento Boutique Creativa de Hearst, donde se creaban productos branded content y coordinaba equipos para diseñar revistas de empresa y fidelización para El Corte Inglés, Repsol o Renfe. Estudió Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid para dedicarse a la profesión más bonita del mundo y ha tenido la suerte de seguir en esta maravillosa brega capaz de saciar su curiosidad infinita sobre cualquier tema. Ha escrito artículos de decoración, cine, belleza, motor, consumo, salud, economía, cultura, moda, gastronomía o medio ambiente; en realidad, sobre cualquier ámbito, incluida una de sus grandes pasiones: los viajes. Como redactora de la revista DeViajes, tuvo la suerte de pasear por todo el mundo durante una década y recibir el Premio de Prensa Escrita de Turismo de Flandes.


















