Poco a poco, los pisos y apartamentos de alquiler turístico se han ido convirtiendo en la opción preferida por muchos viajeros que quieren pasar sus vacaciones en un entorno íntimo y privado, sintiéndose como un ciudadano más, observando y aplicando las costumbres del lugar. Hasta ahí, todo perfecto.
Pero lejos de la situación idílica que plantea el concepto de este tipo de alojamientos, los hoteles son los principales damnificados. Día tras día, sus reservas se ven afectadas por clientes que terminan optando por hospedarse en pisos y apartamentos de alquiler, en lugar de hacerlo en sus habitaciones.
¿El principal problema? La falta de regulación legal. Y es que no estamos diciendo que los apartamentos y pisos de alquiler turísticos supongan un problema en sí, es la ausencia de control la que termina presentando un panorama desequilibrado, afectando al sector hotelero.
No obstante, los viajeros que prefieren hospedarse en hoteles, suponen una clientela fiel que raramente cambiará de parecer. Más que nada, porque los servicios que ofrecen en los hoteles, no se encuentran en los pisos de alquiler.
Por otro lado, el riesgo de alquilar una vivienda a uno o varios desconocidos por un periodo de tiempo tan corto es sumamente alto, más aún si el trámite no está legalmente regulado. Además de enfrentarte a posibles daños o robos, también está el tema de los altercados y los problemas con los vecinos. Voces, ruidos, fiestas… Un cóctel explosivo que puede terminar con la paz del edificio, convirtiendo la vida de la comunidad en una auténtica pesadilla.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).
