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Los 15 mejores cubrecolchones, colchoncillos o toppers para todos los estilos de sueño, según expertos
Duerme como un bebé con un cubrecolchón que hará que incluso el colchón más irregular sea cómodo.

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¿Un colchón deformado con bultos y muelles está interrumpiendo tu sueño reparador? Es lógico que sueñes con una cama de hotel lujosamente cómoda cuando te despiertas cansado y dolorido cada mañana. Pero si no puedes gastarte ahora mismo el dinero que vale un colchón nuevo y caro ahora mismo, o si ya has cambiado tus almohadas y edredones y eso no ha solucionado del todo el problema, no te desesperes. Podrías pensar en comprarte un cubrecolchón o como se les conoce popularmente, un topper.
Si buscas un chollo, este cubrecolchón de Italian Bed Linen es la compra más económica.
Qué cubrecolchón debo comprar
En el Good Housekeeping Institute, han probado 39 cubrecolchones para encontrar los que deberían ayudarte a dormir profundamente. Estos son nuestros favoritos:
Qué tipo de cubrecolchón es mejor
No existe un tipo de cubrecolchón ideal: la elección depende de tu estilo de dormir y tus preferencias personales. Las personas que duermen de lado y quienes sufren de dolor de espalda deberían optar por un cubrecolchón de espuma viscoelástica. Este material es firme pero flexible y se adapta a la forma de tu cuerpo. Ofrece el mayor soporte si te mueves y te das vueltas por la noche. Sin embargo, algunas personas consideran que la espuma viscoelástica es demasiado caliente y suele ser cara.
- Si lo que buscas es una capa de relleno suave y cómoda, elige un cubrecolchón de plumas o plumón. Será más fresco que la espuma viscoelástica y es una buena opción para quienes duermen boca abajo, pero puede ser caro y tendrás que esponjarlo con regularidad.
- Si tienes problemas de alergias, prueba un cubrecolchón de microfibra o fibra hueca. Estos materiales más económicos suelen estar tratados con productos químicos antialérgicos, pero pueden calentarse y tienden a aplanarse rápidamente.
- Una opción para todo el año: busca un cubrecolchón de lana. Este material natural y biodegradable te mantiene cálido en invierno y fresco en verano. Ofrece un soporte medio-firme pero puede resultar un poco pesado.
¿Qué grosor de cubrecolchón debo elegir?
Vale la pena considerar el grosor que tendrá el cubrecolchón que elijas, ya que es posible que debas comprar sábanas más grandes. Los cubrecolchones pueden variar desde láminas finas hasta cuñas de 7,5 cm. En general, un grosor de hasta 5 cm debería ser suficiente.
¿Cuál es la diferencia entre un cubrecolchón y un protector de colchón?
En pocas palabras, los protectores de colchón protegen el colchón de las manchas, las células cutáneas muertas y los ácaros del polvo. Los padres también los utilizan a menudo para proteger las camas de los niños más pequeños ante los accidentes nocturnos.
Los cubrecolchones, por su parte, tienen que ver con la comodidad. Pueden hacer que el colchón sea más alto, más suave, más firme, más cálido o más fresco, según el tipo que compres, pero no protegerán de los derrames ni de los alérgenos. Si utilizas ambos, coloca primero el cubrecolchón.
Cómo limpiar un cubrecolchón
Limpia el cubrecolchón con la misma frecuencia que las sábanas para mantenerlo libre de bacterias. Revisa la etiqueta, pero la mayoría de los cubrecolchones se pueden lavar en la lavadora. Si es posible, sécalos al aire después de lavarlos o sécalos en secadora a la temperatura más baja.





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