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Organizar una cocina pequeña plantea numerosos retos y presupone algo de creatividad. Equilibrar la funcionalidad y el estilo personal ya es difícil cuando se dispone de mucho espacio, pero si el espacio es reducido, mucho más.
Aunque hay muchos trucos de decoración y soluciones de almacenamiento que se pueden utilizar en una cocina pequeña, como carros auxiliares, también hay que tomar algunas decisiones organizativas más pragmáticas.
"Aunque la falta de espacio puede resultar frustrante, una cocina pequeña puede ser una de las estancias con más encanto de la casa", afirma Jen Nash, diseñadora jefe de Magnet. "El resultado final puede ser un espacio único y lleno de carácter, que requiere una mayor consideración e innovación en el diseño. Pero cuando se trata de estas consideraciones, hay algunos elementos que deben evitarse para que el espacio no resulte agobiante y poco práctico".
A continuación analizamos seis cosas que deberías descartar para que tu cocina pequeña parezca más grande y te recomendamos que revises estas ideas para reformar cocinas pequeñas.
1. Comedor muy grande
Mientras que una cocina y un comedor combinados crean un centro social en el hogar, un comedor sobredimensionado debería ser lo primero que hay que descartar cuando se diseña una cocina pequeña.
Si colocas una mesa de comedor grande con sillas sólo conseguirás saturar el espacio y hacer que el acceso y la circulación en al cocina sea poco práctica. Opta por algunas soluciones inteligentes para espacios reducidos, como una estantería flotante para crear una barra de desayuno con sillas o taburetes altos, que puedes ser en tonos coloridos, así crearás un comedor informal.
"Si puedes colocar una mesa, siempre es mejor optar por un diseño redondeado, ya que los bordes más suaves molestan menos en un espacio pequeño", confirma la experta, que también aconseja mesas plegables, porque "cuando no se usan, te permiten conservar un valioso espacio en el suelo y, al mismo tiempo, disfrutar de una cena cómoda con los brazos desplegables cuando llega la hora de cenar".
2. Utensilios que no usas
Desde espátulas hasta tazas medidoras, es muy fácil acumular rápidamente duplicados de diferentes utensilios prácticos en la cocina. Mientras que quienes disponen de mucho espacio y almacenamiento pueden permitirse el lujo de tener diferentes modelos, conviene abandonar esta costumbre si tienes una cocina pequeña. Jen Nash aconseja "analizar tus enseres de cocina y reciclar o donar los duplicados y los objetos que no utilices. Te sorprenderá el espacio extra y el espacio de almacenamiento que liberarás".
Tampoco recomienda guarda utensilios de un solo uso, porque no son prácticos a la larga, "aunque también resulta tentador invertir en los últimos artilugios de cocina, como cortadores de panecillos o de huevos, es más eficiente adquirir el hábito de invertir en artículos de cocina que tengan más de un uso", afirma la experta.
Si no estás seguro de deshacerte de un artículo o electrodoméstico de cocina, prueba el método de la caja. Mételo en una caja y guárdalo fuera de la vista y, si dentro de uno o dos meses lo necesitas, quédatelo. Si no vuelves a pensar en él, probablemente sea el momento de donarlo, reciclarlo o venderlo.
3. Azulejos y baldosas grandes en la cocina pequeña
Jen Nash nos advierte de que "a menudo, la gente piensa que las baldosas pequeñas son la mejor opción en una cocina compacta, ya que guardan proporción con el espacio; pero en una cocina pequeña, cuanto más grandes sean las baldosas y más finas las líneas de lechada, más fluida y amplia parecerá la estancia".
Experimentar con la forma de los azulejos en relación con la distribución de la cocina también es un buen truco de diseño para crear la ilusión de más espacio. La experta recuerda que "las líneas de lechada triangulares, por ejemplo, guiarán la mirada a lo largo de una cocina de galera y realzarán la perspectiva y la amplitud de la estancia. O, si prefieres ampliar la anchura de la habitación, opta por líneas de lechada hexagonales. Engañarán al ojo haciéndole creer que el espacio es más amplio".
4. Armarios con una sola estantería
Los incómodos armarios de cocina con una sola balda suponen un enorme obstáculo para aprovechar al máximo el espacio de almacenamiento en las cocinas pequeñas y organizar despensas. La mayoría de los armarios se fabrican con estantes intercambiables, e incluso con modestos conocimientos de bricolaje, insertar baldas extra supondrá una enorme diferencia en la capacidad de almacenamiento.
"Mide la estantería existente, busca unas nuevas del mismo tamaño e insértalas en el armario con ganchos de montaje. Este truco también te permite personalizar las estanterías, colocándolas a diferentes alturas en función de lo que quieras guardar. Incluso puedes insertar estos nuevos estantes verticalmente, como una forma ideal de almacenar y acceder a las tablas de cortar con facilidad", asegura la experta en decoración.
5. Elige bien los colores de la cocina
Una paleta cromática desequilibrada puede arruinar la decoración de un espacio. Tenemos fantásticas ideas para decorar una cocina en blanco y también si optas por el color verde. Existe la idea errónea de que los colores oscuros deben evitarse en las cocinas pequeñas, ya que pueden hacer que el espacio parezca más compacto. Pero si se utilizan correctamente, pueden crear un ambiente íntimo y un espacio lleno de calidez.
No se trata de evitar un color concreto en una cocina pequeña, sino de evitar una paleta desequilibrada y monótona", explica Jen Nash. Tener un solo tono en todo el espacio hará que parezca unidimensional y más pequeño de lo que realmente es.
En lugar de eso, el experto apuesta por equilibrar el color de tu cocina -oscuro o claro- con acentos de contraste, como tiradores y herrajes metálicos, salpicaderos decorativos y muebles. Así, vas a añadir profundidad e interés visual al espacio. En este sentido, "los detalles y accesorios metálicos resultan especialmente útiles en cocinas pequeñas, ya que hacen que la luz rebote sutilmente por la habitación, haciéndola parecer más grande de lo que es en realidad", confirma Jen Nash.
6. Electrodomésticos independientes
Los electrodomésticos independientes, como frigoríficos, congeladores y vinotecas, son voluminosos y ocupan mucho espacio en la encimera. Jen Nash insiste en "invertir en electrodomésticos integrados es una forma estupenda de liberar espacio y crear un acabado más estilizado. Si se colocan a ras de la pared y a menudo pueden camuflarse como armarios, también ofrecen una estética más elegante y estilizada".
