En esta casa del centro de Lisboa lo mejor son los techos infinitos
La decoración de una casa gana cuando revela cómo es quien vive en ella. Esta, con tanta personalidad, habla de libros, arte y diseño.

Lígia Casanova es interiorista, y su casa, en el centro de Lisboa, es la mejor tarjeta de presentación de su trabajo porque, como es lógico, en ella ha aplicado algunas de las ideas más recurrentes en sus proyectos: combinar bases claras con acentos en color; utilizar papeles pintados para crear ambientes singulares; jugar con cojines, alfombras y plaids que aporten vida y dinamismo a las estancias… Y todo, con un objetivo: “lograr espacios que hagan a la gente feliz”, explica Lígia quien, en colaboración con el arquitecto Luis Rebello de Andrade, han conseguido crear la vivienda perfecta para ella y su familia.


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