Una antigua fábrica textil convertida en loft
Los muebles, en su mayoría recuperados, y los elementos arquitectónicos que definen una construcción tipo loft, caracterizan a esta casa que transmite calidez y sosiego.

Techos altos, vigas vistas y grandes ventanales son las señas de identidad de esta vivienda con alma de loft, aunque con una decoración que huye del tipismo industrial. Lo que en el pasado fue una fábrica textil ha dado paso a un espacio abierto en el que la gama del blanco es la protagonista matizada, sólo, por la calidez que transmite la carpintería verde eucalipto de las ventanas. La base del proyecto: muebles de madera, heredados o adquiridos en anticuarios.
En un espacio común se encuentran el recibidor, el salón y la cocina. La posición del sofá, colocado en perpendicular a la fachada, delimita la zona de estar y crea un pasillo imaginario que conduce a la única habitación cerrada con tabiques: el dormitorio infantil. La cocina, situada en uno de los extremos de la vivienda, mantiene la misma línea estética que el resto de ambientes: colores claros, luz natural en abundancia y un aire campestre reforzado por la presencia de cortinillas en los muebles de obra y en los ventanales, que garantizan la privacidad.
El suelo de toda la casa, madera de ipe pintada en blanco, da continuidad a los ambientes y potencia la luminosidad, que encuentra su aliado en las tonalidades escogidas para paredes y tapicerías. En el extremo opuesto a la cocina se encuentra el dormitorio principal. Éste, junto con la habitación infantil —ambos con un cuarto de baño integrado— son los dos únicos espacios de toda la casa que mantienen cierta independencia. Para su decoración también se escogieron con acierto piezas antiguas que recrean ambientes singulares. Una vivienda diseñada a gusto de los propietarios en la que se han conseguido espacios amplios, envueltos en una agradable sensación de calma.


Cómo el interiorista Markham Roberts diseñó esta casa

Cómo decorar una casa práctica y funcional

En esta casa priman los tonos cálidos y la luz natural

Una casa señorial con decoración japandi en Madrid