Un chalé familiar con patio e interiores a distintos niveles
Esta casa a las afueras de Madrid dice mucho de sus propietarios: una pareja alegre que disfruta de su familia.

Hace algo menos de dos años que Mónica y su familia se mudaron a este chalé en las afueras de Madrid. “Estuvimos buscando casa durante más de un año y, cuando estábamos a punto de tirar la toalla, apareció esta maravilla”, nos cuenta su propietaria. “La primera vez que entré en ella, me envolvió su buena energía e, inmediatamente, me ví viviendo allí. Llamé a Carlos, mi marido, y le dije: ¡la encontré!. Al día siguiente fue él a ver la casa y también se enamoró”. Ahora disfrutan con sus hijos Ariadna y Nicolás, y su perrita Luna, de una estupenda vivienda rodeada de verde. “Queríamos un lugar que no quedase alejado de la ciudad, pero que a la vez nos permitiera estar en contacto con la naturaleza”. Justo lo que le faltaba a su anterior piso, que aunque también era amplio y luminoso, no daba la sensación de vivir en el campo. El proyecto de decoración e interiorismo se lo encargaron a María del Valle.
La luminosidad, sus techos de doble altura o la buena calidad de los materiales eran algunos de los puntos fuertes de la construcción, pero es que, además, la casa se encontraba en perfecto estado. Tan sólo hubo que reformar los baños, que Mónica y Carlos quisieron diseñar a su gusto, y el jardín, que sí estaba algo descuidado. “Necesitaba algo de verde y plantas de distintas especies y tamaños para delimitar zonas y darle forma. Esta primavera nos animamos a plantar césped alrededor de la piscina y techamos el porche”, explica Mónica.
De la decoración se encargaron ellos mismos, aunque ambos trabajan en el mundo financiero.“A los dos nos encanta. Tenemos gustos muy parecidos”. Con las ideas claras, “queríamos espacios cálidos y acogedores, donde apeteciera estar y no moverse”, e inspirándose en imágenes que encontraban en Pinterest, libros y revistas, han creado la casa de sus sueños: ambientes que transmiten el carácter alegre y sociable de la pareja, y donde reina el toque exótico de Mónica, que lleva Colombia en las venas. “Mi padre, malagueño y mi madre, colombiana. Allí nací y viví hasta los doce años. Es un país lleno de color, multirracial, con una inmensa riqueza artesanal”, nos cuenta.¿Qué mejor fuente de inspiración?


Cómo el interiorista Markham Roberts diseñó esta casa

Cómo decorar una casa práctica y funcional

En esta casa priman los tonos cálidos y la luz natural

Una casa señorial con decoración japandi en Madrid