- 50 pisos pequeños y apartamentos de diferentes estilos
- Reformas en casa: los 25 antes y después más impactantes
- 60 ideas para decorar un piso pequeño con estilo y encanto
Al igual que los pisos de obra nueva suelen carecer de alma, los inmuebles antiguos suelen pecar de una distribución excesivamente compartimentada que constriñe y oscurece los espacios. Esta última era la situación a la que se enfrentaban los propietarios de este piso de 230 metros cuadrados en el barrio ovetense de Buenavista. Tras ampliar su familia, habían decidido buscar un inmueble de mayores dimensiones, sin embargo, la distribución necesitaba un giro total. "El primer paso fue estudiar la distribución. Nuestro objetivo era repartir mejor los espacios, ganar luz natural y convertir la vivienda en un hogar más funcional acorde a sus nuevas necesidades. Esta se encontraba muy compartimentada, y algunas estancias resultaban demasiado oscuras", explica la interiorista Covadonga Díaz, fundadora de CONUVE Studio.
"Para lograrlo, aumentamos y comunicamos toda la zona de día a través del derribo y la apertura de varios tabiques, mediante unas carpinterías acristaladas a medida en madera de roble que conectan la amplia cocina con el vestíbulo de entrada y el salón-comedor", añade. A todo se sumó la reorganización del resto de estancias para incorporar el dormitorio principal en suite con su vestidor, dos habitaciones –una para las niñas y otra de invitados–, un despacho donde la pareja comparte espacio de trabajo, tres baños y una zona de lavandería.
La cocina se planteó como el corazón de la vivienda, una zona donde la familia pasaría mucho tiempo. Por ello, el espacio se organizó en torno a una isla central que, además de zona de trabajo, integra una barra de desayuno. "La cocina conecta directamente con la lavandería, y en segundo plano con el comedor y el salón, priorizando los recorridos, la practicidad y funcionalidad de la estancia", indica Covadonga Díaz. La zona de lavandería es un espacio neutro, con armarios de acabado mate, azulejos en la misma gama cromática y pomos dorados.
En el salón, destaca la amplia zona de almacenaje visto y oculto de la pared frontal, diseñada a medida por el estudio. "La realizamos en la misma madera de roble del resto de carpinterías, donde combinamos diferentes soluciones de almacenamiento", expone la interiorista.
Aunque toda la vivienda destaca por su tonalidad blanca, se optó también por incluir texturas a través de fibras naturales en las tapicerías y tejidos, presentes en textiles, cortinas, revestimientos y varias piezas de mobiliario. Como ejemplo, el efecto entelado de los frentes de armario en el vestidor, o el revestimiento vertical de la pared del cabecero en la suite. Asimismo, se añadieron estampados y distintos patrones para aportar un toque de personalidad y color en algunos muebles tapizados –diseño del estudio–, y en los empapelados de múltiples paredes: la zona de la entrada, el comedor y el baño de cortesía, entre otros. Como separación entre el dormitorio y el vestidor tipo walk-in closet en la habitación principal, se diseñó un mueble tocador de madera.
"Se trata de un proyecto hecho a medida donde hemos tratado de dar con soluciones funcionales y coherentes al estilo de vida de nuestros clientes, apostando por la nobleza de los materiales, las proporciones del espacio y el tratamiento de la luz", concluye Covadonga Díaz.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).

























