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Menos es más. Esta frase, acuñada por el arquitecto Mies van der Rohe, podría resumir la transformación que el estudio Calienzo ha ejecutado en este piso de la calle Ponzano. Nada más entrar, la luz fluye libremente, los espacios se conectan sin obstáculos y una sensación general de amplitud y calidez contrasta con la distribución original de la vivienda, construida durante la expansión urbana madrileña de 1860. ''Queríamos demostrar cómo menos puede ser más'', explican desde el estudio.
El resultado de la intervención es un espacio donde la estructura original se muestra con orgullo, integrada en una distribución contemporánea que divide la vivienda en dos zonas bien diferenciadas. Por un lado, un eje comunal que conecta cocina, vestíbulo, salón y terraza en un recorrido fluido. Por otro, una zona íntima con tres dormitorios en suite (dos de ellos, de dimensiones más reducidas). La transición entre ambos mundos se resuelve con una esquina redondeada que funciona como bisagra arquitectónica y visual, y con un estilo minimalista y cálido.
La ubicación privilegiada del piso multiplica el valor de esta intervención. Ponzano no es una calle cualquiera, forma parte del histórico Ensanche madrileño. Hoy, este barrio ha evolucionado hasta convertirse en uno de los epicentros gastronómicos de la capital, con decenas de restaurantes y bares que dotan de vida a sus aceras. A pocos minutos caminando se encuentran el Parque de Bravo Murillo, los Teatros del Canal o el Museo Sorolla, configurando un entorno rico en opciones culturales y de ocio.
El equipo de Calienzo ha sabido aprovechar este contexto para diseñar espacios en sintonía con el barrio. La cocina moderna, con su encimera de acero inoxidable, sus soportes para copas y utensilios y su aire profesional, es un claro homenaje a la escena gastronómica circundante.
La paleta de materiales se reduce a cuatro elementos: pintura blanca para paredes, madera de roble para suelos y mobiliario, azulejos para zonas húmedas y metal para detalles y cocina.
En el salón, la luz natural baña un espacio donde cada mueble ha sido cuidadosamente seleccionado. El sofá Catena de Ferm Living, con sus líneas inspiradas en la curva catenaria, convive con la lámpara M68 de Miguel Milá, cuya pantalla evoca siluetas femeninas. La mesa auxiliar Rivet de Jonas Trampedach aporta carácter con su sistema de remachado artesanal, mientras que otro diseño de Milá, la lámpara TMD, proporciona una iluminación ajustable gracias a su ingenioso mecanismo.
Estos clásicos del diseño comparten espacio con elementos como el exprimidor Juicy Salif de Philippe Starck para Alessi, una pieza tan funcional como escultórica, o el candelabro modular de Hans Nagel, que añade calidez en las noches invernales.
Diseñada como una extensión del barrio, la terraza cuenta con jardineras retroiluminadas que proyectan un encantador juego de sombras en el techo, creando una atmósfera mágica al caer la noche.
La madera continúa su protagonismo en los dormitorios, donde el estudio ha diseñado piezas a medida fabricadas por artesanos madrileños. La cama principal destaca por su inteligente aprovechamiento del espacio, con un sistema de almacenamiento oculto tras el cabecero. Las habitaciones secundarias siguen el mismo principio de diseño, reforzando la coherencia estética que impregna toda la vivienda.
La suite principal, con su diseño minimalista y contemporáneo, emerge como un oasis de confort y estilo. La habitación, bañada por la luz natural, acoge una amplia y acogedora cama vestida con delicada ropa de cama blanca. En armonía con la estética, los armarios empotrados de madera ofrecen un elegante y generoso espacio de almacenaje, mientras que una innovadora pantalla de cine con proyector se oculta discretamente en la parte trasera del cabecero, fusionando entretenimiento y funcionalidad sin sacrificar el diseño.
El baño de la suite principal, se adhiere a la misma paleta de colores claros y líneas limpias que predomina en toda la vivienda.
En conclusión, Calienzo ha diseñado un hogar que responde a las necesidades contemporáneas sin olvidar su contexto histórico y urbano.
Proyecto e información: Cortesía de Calienzo.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).
