- 55 ideas para decorar un piso pequeño con estilo y encanto.
- Los 40 pisos pequeños de menos de 50 metros más bonitos.
- Reformas en casa: los 25 antes y después más impactantes.
En este piso de 214 metros cuadrados, reformado por el estudio Apunto, la premisa estaba clara: lograr una fusión armoniosa entre clasicismo y modernidad, donde cada detalle redefiniese el lujo discreto. Ubicado en un edificio histórico del barrio madrileño de Chamberí, en chaflán y con una planta poligonal, el inmueble dispone de seis balcones que integran la esencia de la ciudad bajo un enfoque contemporáneo.
El diseño se centra en el área social, donde el salón –bañado por la luz que accede por los cuatro balcones– conecta sin esfuerzo con la cocina y el comedor. Esta transición se apoya en un muro estructural original que no solo mantiene la autenticidad de la arquitectura, sino que también articula una conexión fluida hacia las zonas de descanso, logrando un equilibrio entre el carácter histórico y la funcionalidad moderna.
La distribución en este sector más privado incluye cuatro dormitorios. Dos de ellos, al igual que el salón, disfrutan de la luz natural de la fachada principal. Los otros dos cuentan con baño en suite, y la habitación principal incluye además un vestidor.
Para establecer una continuidad visual en la zona de día, se ha empleado un revestimiento de friso decorativo de lamas verticales. Este recurso conecta las distintas estancias y aporta cohesión al diseño, ocultando a su vez elementos funcionales, como el armario del recibidor y una puerta de servicio que da paso a la zona de lavado en la cocina. Incluso el mueble del salón cuenta con este revestimiento que permite ocultar la televisión cuando no se usa, manteniendo la estética pulida de la estancia.
La cocina, ubicada estratégicamente entre la zona social y la privada, ha sido diseñada para integrarse sutilmente en el espacio. Con una cuidada combinación de colores, se organiza en dos tonos: un greige para el almacenamiento en columna y los electrodomésticos panelados, enfrentado con una pared negra con vitrinas y vinoteca.
Entre ambos frentes destaca una isla central con una encimera de cascada negra, cuyo veteado añade dinamismo y elegancia.
Uno de los puntos más destacados de la reforma es la restauración de las molduras de escayola originales, rescatadas durante la demolición. Apunto ha sabido respetar el alma del edificio, replicando algunas de estas molduras para adaptarlas a la nueva distribución y dotando a los techos y paredes de un estilo clásico renovado. Las molduras en paredes funcionan como delicados baquetones que unifican la estética de las superficies verticales y techos, logrando una atmósfera armoniosa y atemporal.
La selección de materiales resalta una combinación cálida y neutra con toques de negro que añaden carácter. El suelo y el mobiliario presentan acabados en madera natural, mientras que la piedra caliza de Campaspero y el mármol negro Marquina aportan texturas sofisticadas en algunos muebles y acabados de la vivienda.
Las puertas de paso, en un color oscuro y con una altura de 240 centímetros, destacan en el diseño, sumando a la vivienda un toque moderno que contrasta con los tonos neutros predominantes en la paleta general.
En todo el interiorismo, Apunto mantiene líneas puras y limpias, recurriendo a tonos neutros y materiales nobles como piedra, madera y mármol, que otorgan al conjunto una sofisticación discreta.
Los elementos puntuales en negro, desde muebles hasta cuadros, crean un diálogo visual con la arquitectura y añaden un contraste que refuerza la coherencia de todo el proyecto.
Con este trabajo, los arquitectos han logrado una vivienda que respira historia y modernidad a partes iguales, respetando la esencia clásica del edificio sin renunciar a la funcionalidad contemporánea.
Proyecto e información: Cortesía de Apunto.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).


























