- 25 reformas espectaculares: antes y después.
- Las 65 casas de campo más bonitas de madera o piedra.
- Las 65 piscinas más bonitas y funcionales que hemos visto.
- Las 20 casas con jardín más bonitas que puedes ver: modernas.
''Esta casa es muy especial para nosotras porque era de unos amigos de nuestros padres y veníamos cuando éramos niñas. Después, ellos se fueron a Madrid y la vendieron, y cuando hace dos años la vimos en venta, no lo podíamos creer'', así comienzan la historia de este emotivo proyecto de rehabilitación en una casa de arquitectura tradicional en Málaga, las interioristas del estudio La Albaida, quienes no dudaron en hacerse con la propiedad para devolverle su esplendor original. Desde el principio, la misión era clara: mantener el carácter histórico de la vivienda, pero adaptándola a las necesidades modernas. De este modo, elementos únicos como las puertas y ventanas antiguas que habían sido recuperadas de antiguos cortijos y conventos, fueron cuidadosamente restaurados. También se conservó el suelo de barro artesanal, los azulejos pintados a mano y las vigas de madera.
Nueva distribución
Para maximizar la funcionalidad y la conexión con el entorno, hubo que hacer ciertos cambios en la distribución. Para empezar, la cocina se abrió al jardín, permitiendo una integración perfecta con el exterior. La distribución de los dormitorios también se ajustó, y la entrada principal se transformó para mejorar la luminosidad y el disfrute del patio. Además, se eliminaron las rejas de los ventanales del salón para ofrecer vistas despejadas al jardín, y se crearon nuevos espacios como una terraza para el apartamento de invitados y una renovada área de piscina.
El amplio hall de entrada, con su generosa luz natural, incluye una zona de estar junto a una ventana antigua restaurada con contraventana de celosía. Las puertas originales de la casa, restauradas y teñidas en el mismo color que la carpintería exterior, complementan el diseño. Asimismo, el suelo de barro manual, recuperado y sellado, preserva las imperfecciones artesanales que añaden carácter al espacio.
Toda esta esencia tradicional contrasta con los cuadros abstractos que añaden un aire contemporáneo a los espacios.
El salón, con sus dos chimeneas originales, fue reorganizado para crear espacios distintos: uno para la televisión y otro para la lectura y las reuniones sociales. La chimenea de mármol original fue transformada para permitir la instalación de un televisor, mientras que la segunda chimenea, decorada con azulejos pintados a mano, se conservó y se rodeó de librerías que aportan un aire de biblioteca al área de estar.
Para mantener la conexión entre el interior y el jardín, se optó por estores de lamas de madera en lugar de cortinas. Los tejidos del salón, en lino y texturas naturales, combinan tonos neutros con detalles en negro y terracota, creando una atmósfera cálida y mediterránea.
Desde la cocina se accede a tres áreas de comedor exterior, cada una con su propio carácter: una cubierta por una morera, otra con una chimenea exterior y una última con preinstalación para una zona de barbacoa.
El porche cubierto, construido con columnas antiguas y vigas de madera, se ha convertido en un espacio de estar muy confortable. Los sofás, diseñados a medida y tapizados con telas de exterior, se complementan con alfombras y muebles antiguos para crear un ambiente acogedor. El espacio se completa con una mesa auxiliar y una consola que conserva un azulejo antiguo de la casa, integrando la historia en el diseño.
El pasillo que precede a los dormitorios, con su arco y escalones decorados con azulejos artesanales, se ilumina con apliques de cristal soplado y focos que destacan las obras de arte. El suelo de microcemento en los dormitorios, en combinación con las puertas originales restauradas, crea un equilibrio entre lo antiguo y lo moderno.
El dormitorio principal presenta un cabecero revestido con papel vegetal artesanal y una iluminación cálida.
Los dormitorios secundarios, distribuidos en simetría, utilizan papel con textura textil y alfombras de colores para agregar personalidad.
El "dormitorio del torreón" mantiene el suelo de barro original y presenta una mezcla de elementos tradicionales y modernos.
Anexo a la casa se encuentra el apartamento independiente para los invitados, con una cocina completa y una terraza privada con vistas al mar. Este espacio se integra con el jardín mediante un corredor que ofrece vistas panorámicas de la arquitectura de la casa y sus patios.
Con el proyecto, el estudio ha conservado la esencia de la vivienda, al mismo tiempo que ha dado forma a un hogar moderno y funcional.
Proyecto e información: La Albaida.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).