- 25 reformas espectaculares: antes y después.
- Las 60 casas de campo más bonitas que vas a ver hoy.
- Las 20 casas con jardín más bonitas que puedes ver: modernas.
En una pendiente rocosa del archipiélago noruego, entre el océano y el bosque, se erige esta original casa hecha de madera sobrante. Kolman Boye Architects, asistidos por Asger Højlund, diseñaron y construyeron la vivienda de manera similar a la madera de la que está compuesta: como una parte natural de un paisaje moldeado por el viento y el clima.
Cada pieza de madera sobrante fue examinada, procesada y preparada para soportar el clima noruego, a veces implacable.
El curioso origen del proyecto
La idea de emplear madera sobrante para la construcción surgió por una feliz coincidencia mientras ambos arquitectos trabajaban en dos proyectos que involucraban madera de Dinesen, aunque en formas muy diferentes. Erik trabajaba en una escalera a medida para un proyecto en Noruega utilizando tablones clásicos de Dinesen Douglas, mientras que Víctor exploraba los posibles usos de la madera sobrante de la producción de tablones de roble de Dinesen para un proyecto estudiantil en la Real Academia Danesa. Tras ser conscientes de todas sus posibilidades, decidieron llevar a cabo un experimento fascinante, pero sobre todo, eco responsable y sostenible: construir una casa con madera sobrante.
La idea central era crear una vivienda que coexistiera con su entorno y en armonía con la naturaleza sin dejar una huella de carbono dañina. La sostenibilidad de la estructura se basó en dos aspectos: capturar la mayor cantidad de CO2 posible utilizando una construcción de madera, y emplear la madera sobrante de la producción de tablones de Dinesen para maximizar la vida útil de los retazos, dándoles una nueva función.
La casa se distribuye en varias estructuras en cinco niveles diferentes para adaptarse al paisaje y al entorno. El objetivo era claro: minimizar el impacto de la nueva construcción en la naturaleza. Por ello, los estrechos senderos que fluyen a través del bosque y que han sido moldeados generación tras generación, se conservaron perfectamente.
Por otro lado, la arquitectura acomoda la vista natural del mar entre los troncos de los árboles antiguos. De este modo, los actuales propietarios pueden disfrutar de los rincones soleados y resguardados que emergen en combinación con los árboles y los senderos sinuosos.
Los arquitectos querían que los propietarios disfrutaran de una sensación de bienestar y coexistencia simbiótica con la naturaleza, tanto en el interior como en el exterior.
Así como los retazos de roble se emplearon en los techos y la fachada, el abeto Douglas se eligió para los interiores. El resultado es una vibrante interacción entre las tonalidades y el aroma del abeto Douglas. Este guiño a la naturaleza está presente en elementos como estanterías, librerías, peldaños de escalera, y en la cocina diseñada a medida.
Proyecto e información: Cortesía de Kolman Boye Architects.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).