- Un apartamento reformado con vigas vistas
- Un piso con espacios diáfanos, vigas y estilo vintage
- En este precioso piso reformado se dejaron las vigas de madera y algunas paredes de ladrillo
Cuando los interioristas del Estudio Matmata comenzaron esta reforma integral, nunca imaginaron la sorpresa que escondía: vigas de madera natural que una vez restauradas han pasado a ser la joya de la corona. Tradicionalmente, las vigas vistas de madera eran propias de decoraciones de carácter rústico, pero desde hace algunos años se han convertido en un elemento de gran valor decorativo. Y gracias a que décadas atrás la moda pasaba por ocultarlas tras falsos techos de cañizo y yeso, ahora podemos tener la suerte de encontrarnos con un inesperado elemento arquitectónico que aporta calidez y personalidad a la casa.
Un comedor con vigas naturales de madera
En esta reforma integral, se han recuperado y restaurado las vigas naturales respetando su aspecto original. Y aunque su peso visual es contundente, quedan perfectamente integradas gracias a la altura que alcanza ahora el techo. Para restaurar las vigas se limpiaron las capas superficiales y restos del falso techo, y se aplicó un tratamiento anti-parásitos como medida preventiva. Un proceso totalmente manual que acaba con el barnizado en acabado natural.
Además, para no romper con esta hogareña atmósfera, todos los detalles están debidamente estudiados y pensados. La climatización se ha integrado de una manera muy elegante y sutil, en la que apenas se aprecia la instalación del difusor lineal colocado bajo el travesaño principal. También la lámpara, hecha a medida, con pantalla exterior, cilindro de rejilla interior y acabado en yute.
Estilo rústico y modernidad para esta cocina abierta al salón
Los espacios se han replanteado para dotar a la vivienda de una distribución más acorde a las necesidades de la familia. Lo que ahora es la cocina –que anteriormente fue un aseo–, se diseñó para crear un espacio unido y abierto al salón. La unión visual es evidente, pero la del suelo es muy especial. Las baldosas son de Wow Design y se fusionan a la perfección con la madera del salón. Al igual que sucede con el negro, el gris claro y la madera de roble que combinan con estilo y personalidad. El toque especial lo da el mostrador con trasera y lateral alistonados. Además, el detalle de la hornacina decorativa aporta un extra de calidez al lado de la encimera porcelánica de Laminam.
Un aseo colorista para los más pequeños de la casa
Alicatado a media altura, este baño cuenta con un papel vinílico en tonos azules que se ha potenciado con un espejo retroiluminado. Un aspecto juvenil y fresco, ideal para los hijos jóvenes de esta vivienda. Las baldosas son de Baldocer y la grifería cromo de Paffoni. El mueble del lavabo es de aspecto clásico y permite que el protagonismo se lo lleve el suelo y las paredes. Se ha apostado, además, por una ducha de obra que ofrece continuidad con el suelo del baño.
El baño principal: textura, geometría y diseño
Con un aire más maduro, este aseo cuenta con detalles que lo elevan. Se ha colocado un mueble con pila sobre encimera a la derecha, doble espejo rectangular, y de nuevo alicatado de Baldocer, grifería de Paffoni y ducha de obra.
Especial protagonismo tiene el acabado arenoso de la baldosa de la pared que, junto con las formas geométricas y los tonos tierra, crean un baño de diseño.
Proyecto e información: Cortesía de Estudio Matmata.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).