Si estuvieras buscando piso y encontrases un inmueble de los años 40, cuyos elementos originales transmitieran toda la nostalgia y la elegancia de la época, sería un pecado no aprovecharlo, ¿verdad? Las protagonistas de esta historia lo tuvieron claro nada más verlo. Se trata de una vivienda ubicada en la Gran Vía Fernando el Católico de Valencia, una de las principales avenidas de la ciudad.

Las nuevas propietarias buscaban un lugar en el centro, donde pasar algún fin de semana y disfrutar del tiempo en familia. Y por supuesto, el flechazo fue inevitable. Las molduras, la carpintería, la altura de los techos... todos los elementos de la vivienda eran auténticas joyas que, tanto las clientas como los arquitectos de Studio Hc –encargados de la reforma–, estuvieron de acuerdo en conservar y enaltecer para no perder la esencia original del inmueble.

Los materiales se seleccionaron aposta para crear continuidad, como el nuevo suelo laminado en espiga, o los azulejos de aspecto artesanal del baño. En cuanto al estilo decorativo, la premisa estaba más que clara, la vivienda debía transmitir paz e invitar al descanso, abogando por un minimalismo cálido. Los elegidos: tonos tierras y tejidos naturales, en combinación con algún punto de color.

recibidor con suelo de parquet en espiga, techo con molduras, puertas con arcos y consola de metal negropinterest
Jonathan Ristagno
Aparador metálico, de Ixia. Lámpara de techo de lino en color natural, de House Doctor.

A la vivienda se accede a través de un gran recibidor que nos revela lo que encontraremos a continuación: molduras decorativas de escayola, puertas de paso originales en forma de arco y, como decíamos, una gran altura de los techos. Dicha altura permitió incluir un amplio espejo de roble que aumenta el espacio, y que completa la decoración junto a un banco de madera y una alfombra de yute.

La decoración del espacio fue muy discreta, intentando no volverse protagonista, con un mobiliario liviano.
salón abierto a la cocina de diseño minimalista en tonos neutrospinterest
Jonathan Ristagno

Cruzando una puerta de vaivén que divide los espacios llegamos a la zona de día. La única modificación de tabiquería se realizó en el salón-comedor para integrar la cocina en el mismo ambiente, ganando un área diáfana.

El salón está equipado con unas mesas de centro tipo nido de Ixia, que permitieron crear un espacio central donde los niños pudiesen jugar cómodamente en la alfombra. A su vez, la alfombra en tonos verdes se hizo a medida, y el sofá se colocó descansando en una de las paredes.

salón con sofá gris, mesas de centro de madera tipo nido sobre alfombra de pelo y láminas decorativaspinterest
Jonathan Ristagno
Láminas decorativas, de Westwing.

También se aprovechó en este mismo espacio uno de los huecos que antiguamente estaba ocupado por un armario, para concebir una zona de estudio con un escritorio de madera de roble diseñado a medida, de Bloomingville.

salón con sofá gris, mesas de centro de madera tipo nido sobre alfombra de pelo, láminas decorativas y escritorio en la esquinapinterest
Jonathan Ristagno
escritorio con balda de madera y silla tapizada en beigepinterest
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La cocina tiene un protagonismo indiscutible, con una isla central en granito de color negro que combina con el mobiliario en color topo.

Al tratarse de una vivienda de fin de semana, la cocina es pequeña, pero dispone de mucho espacio de almacenaje.
cocina con isla central de granito y armarios sin tiradores de color topopinterest
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Los taburetes verdes de Westwing pusieron el broche de oro al interiorismo.

En el comedor, la mesa tipo Tulip se combinó con unas sillas tapizadas en color beige de Kave Home, y una lámpara suspendida ligera con dos pantallas de globo en diferentes acabados de cristal, de la firma House Doctor.

mesa de comedor redonda blancapinterest
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El armario se transformó en un práctico desayunador.
mesa de comedor redonda blanca y sillas tapizadas en beigepinterest
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En el salón-comedor, las cortinas con faldón y ribete negro son de IKEA, y en las paredes se colocaron unas láminas originales de la artista local África Pitarch.

mesa de comedor redonda blanca y sillas tapizadas en beigepinterest
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El dormitorio principal destaca por sus molduras y dimensiones, donde se aprovechó el rosetón original de escayola para suspender una lámpara con pantalla de lino. La cama Queen Size se acompañó de un cabecero textil de Kave Home, apliques de gran tamaño en color verde –también de Kave Home–, y dos mesitas metálicas suspendidas en color blanco de House Doctor.

dormitorio minimalista con cabecero de lino y rincón de lectura con butaca blancapinterest
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La habitación se ultimó con un rincón de lectura compuesto por una butaca con tapizado bouclé de Zara Home, una alfombra trenzada en color hueso de Kave Home y una lámpara negra de Luxcambra. En cuanto a las cortinas, se seleccionó el mismo modelo de IKEA del salón para aportar paz y serenidad.

rincón de lectura con butaca con tapizado bouclé, alfombra redonda y lámpara de pie metálica negrapinterest
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Para la habitación infantil, se eligió mobiliario de madera siguiendo el modelo Montessori. Los niños debían poder usar todos los muebles de forma autónoma y disfrutar de un espacio pensado para ellos. A través de una estética 'tipi', se creó un ambiente perfecto donde jugar y soñar (todo el mobiliario es de Kave Home).

habitación infantil de color blanco con muebles tipo tipipinterest
Jonathan Ristagno
puertas arqueadaspinterest
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baño con mueble bajolavabo suspendido en color verdepinterest
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En resumidas cuentas, el proyecto dio lugar a una vivienda luminosa, exaltando su naturalidad y buscando el acogimiento y el disfrute en todas las estancias del piso. Sin duda, la combinación idónea para un plan de fin de semana.

Diseño de arquitectura e interiorismo: Studio Hc.


Headshot of Aránzazu Díaz Huerta

Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.

Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.

Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.

Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).