Este dúplex de estilo vintage parece cosa de película, pero es tan real como la vida misma. De hecho, es el hogar de una familia con pasión por la decoración nostálgica. Se encuentra en el centro de París, y la planta superior cuenta con techos abuhardillados que le dan un toque de lo más romántico a los espacios. Para aprovechar al máximo los metros cuadrados, la interiorista Charlotte Fequet optó por una distribución abierta de las zonas comunes, pintando el techo de blanco para reforzar la luminosidad y llevando la madera a los suelos.
El resto de la gama cromática incluye tonalidades suaves como verdes y azules que se vuelven más intensos en puntos concretos. También destacan los papeles pintados con patrones geométricos y botánicos, y el uso de materiales como el mármol y el latón, claves a la hora de apostar por una estética vintage y parisina.
A través de un arco llegamos a la cocina y al comedor. Este último dispone de una gran mesa redonda con el sobre de mármol, y la cocina tiene los armarios pintados en blanco y azul, dejando el papel pintado para el área del fregadero.
En la escalera que conecta ambos pisos, Charlotte eligió una preciosa barandilla de forja negra que casa a la perfección con el espíritu nostálgico de la vivienda.
En el dormitorio de los padres, con baño en suite, los armarios combinan lo antiguo y lo moderno a través de las puertas con rejilla de ratán.
La habitación de la niña incluye una cama con estructura de casita de madera siguiendo el método Montessori, con armarios blancos empotrados y un papel pintado con dibujos de árboles para decorar el rincón del escritorio.
También hay una habitación de invitados con un sofá cama y una zona de escritorio.
En el baño, el suelo de terrazo y los azulejos blancos armonizan con el mueble mid-century, dando forma a una estancia que parece sacada de otra época.
Se trata, sin duda, de un hogar muy personal que hará las delicias de los amantes del estilo vintage. Y tú, ¿vivirías en este dúplex abuhardillado de París?
Proyecto e información: Cortesía de Charlotte Fequet.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).
