Como no podía ser de otra manera, el estilo nórdico protagoniza el diseño de este apartamento de 50 metros cuadrados con un pequeño balcón en Gotemburgo, Suecia. Ubicada en un edificio de 1903, la vivienda mantiene intacto el espíritu señorial de la arquitectura de la época, presente en las molduras de los techos y en los amplios ventanales que bañan de luz natural las amplias estancias.
Los techos altos permiten que las paredes exhiban múltiples fotografías a color y en blanco y negro, como si de una galería de arte se tratase. Estas, junto a elementos decorativos que aportan elegancia, como los espejos barrocos con marcos dorados, generan un ambiente nostálgico que nos traslada años atrás.
Recibidor, salón, comedor y cocina se disponen en un mismo ambiente de concepto abierto, adaptado a las necesidades de la vida moderna.
Gracias a la altura de los techos, el dormitorio se proyectó sobre el salón en una especie de caja que no resulta claustrofóbica: la iluminación natural, el color blanco y las vistas al salón son la clave. A pesar de las reducidas dimensiones del apartamento, también hay espacio para un vestidor, construido bajo el dormitorio, y conectado con este a través de unas escaleras.
Los armarios de la cocina se eligieron en un suave color gris con los tiradores dorados y la encimera de mármol blanco. También en esta zona de la casa encontramos fotografías. Destacan el fondo de azulejos cuadrados en blanco con las juntas negras, y las lámparas doradas sobre la mesa del comedor.
El balcón, coquetamente decorado con una guirnalda de bombillas, ofrece un rincón estupendo para desayunar o incluso cenar al aire libre (cuando el tiempo lo permita). En definitiva, estamos ante el apartamento ideal para una parejita de millennials y cosmopolitas recién independizados, ¿no crees?
Información: Cortesía de Alvhem.
Aránzazu Díaz Huerta es experta en decoración en Nuevo Estilo, por eso ha convertido su hogar en una especie de pop up store de las últimas tendencias, y por eso disfruta tanto elaborando contenidos sobre interiorismo. Además, se lo pasa genial buscando los hoteles más originales del mundo para sorprender a sus lectores. Le apasiona todo lo que tiene que ver con el hogar, pero también la moda, la belleza, el lifestyle y las mascotas, y aunque no tiene cuenta en TikTok, no se pierde ni un solo trend.
Se graduó en Comunicación Audiovisual en 2016 en la Universidad Pontificia de Salamanca, y continuó sus estudios con un máster en Periodismo Cultural por la Universidad San Pablo CEU. En el verano de 2017, hizo el curso de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. Y cuando llegó la pandemia, se refugió en el Curso Online de Periodismo Especializado en Moda, Belleza y Estilo de Vida de la revista Vogue en Condé Nast College Spain. Además, como buena cinéfila que es, ha colaborado en el libro ''El clasicismo en el cine. Una mirada intergeneracional'', de D. Pedro Sangro Colón y D. Miguel Ángel Huerta Floriano.
Antes de comenzar su trayectoria en el mundo del periodismo freelance, pasó por la Cadena Ser de Oviedo y la revista cultural El Duende. También tuvo su propia columna de opinión en el periódico Salamanca RTV al día.
Desde el año 2017, colabora como redactora de contenidos online en Mi Casa, Nuevo Estilo y otras revistas del Grupo Hearst, incluyendo el departamento de Branded Content. En su tiempo libre, escribe relatos de ficción y no ficción, habiendo publicado en la revista literaria Fábula, y hace fotografías de paisajismo (especialmente, de lugares donde haya flores).